El Oriente asturiano atesora seis de las 9 estrellas de toda la región
15 dic 2021 . Actualizado a las 10:38 h.El empresario sotrondino Marcos Granda ha sido el gran triunfador de la noche de las estrellas Michelin. Granda ha conseguido una estrella Michelin para su restaurante Ayalga en Ribadesella y otra para Nintai el local japonés que también posee en Marbella. Las dos estrellas se unen a otras tres: las dos de Skina en Marbella y Clos, con una estrella en Madrid. Cinco estrellas para Granda.
Desde niño ya aprendió que la hospitalidad se lleva en la sangre y que saber cómo tratar a los invitados es tan importante como tener un buen producto. Esa lección de vida que le enseñó su padre ha guiado sus pasos profesionales y es una de las claves de su éxito empresarial. Este año lanzó una nueva referencia culinaria del oriente asturiano, Ayalga. Una propuesta gastronómica que gira en torno al producto local y de temporada en el Hotel Villa Rosario, en primera línea de mar en Ribadesella.
A principios del año 2019, acompañado de un equipo consolidado, Granda se marcó la meta de crear un restaurante en su lugar de origen y compartir con sus paisanos lo aprendido en sus más de veinte años de experiencia. Halló el lugar perfecto: un pequeño hotel de cuatro estrellas en Ribadesella, el ya citado Hotel Villa Rosario. Se trata de un antiguo Palacete ubicado en pleno paseo marítimo frente al Cantábrico y edificado en 1914 por un emigrante afortunado que soñó con construir una auténtica joya que se ha convertido ya en uno de los hoteles más especiales de la zona.
Granda ha protagonizado la novedad asturiana en la nueva guía Michelin. Y resalta el peso del Oriente asturiano en la gastronomía del Principado, porque seis de las nueve estrellas se encuentran en Parres, Ribadesella y Llanes. Nacho Manzano mantiene sus dos estrellas con su Casa Marcial, en La Salgar, y Campoviejo la suya en El Corral del Indiano. Además Arbidel en Ribadesella y El Retiro en Pancar (Llanes) conservan su estrella. En Gijón se encuentra Auga y en Prendes Casa Gerardo, otro clásico que aspiraba a una segunda estrella. Y por último el Real Balneario de Salinas. La Salgar, el restaurante de Esther Manzano en Gijón no la conserva porque sigue cerrado por la pandemia.