Quizás sea uno de sus sueños no confesados. Puede incluso que algún día lo anuncie por su Twitter, tras pegar los trozos de su Starship. Pero en cierto modo Elon Musk ya viajó en el tiempo cuando resucitó Tesla, la marca que homenajea a otro utopista maltratado por la historia, padre de numerosos inventos, y que a principios del siglo XX había llegado a Galicia en forma de un «revolucionario» tratamiento para enfermos crónicos.
Jesus Flores