La moderación salarial, la contención de los precios del crudo durante estos años y el vigor de la balanza comercial, gracias en buena medida a los dos primeros factores, han sido los pilares de la recuperación económica de España. El país, sin embargo, necesita afrontar a corto plazo dos grandes retos para no ver mermada la senda de crecimiento: el elevado volumen de deuda, tanto pública como privada, que acumula y la estructura de un mercado laboral cuyos déficits saltan a la vista
Julio G. Sequeiros