El uruguayo jugó de azul tanto en Primera como en Tercera División
22 feb 2018 . Actualizado a las 20:10 h.Juan Antonio González Crespo (Montevideo, 27/05/1972), «Juanchi» para todos los aficionados al fútbol, sobre todo para los oviedistas de finales de siglo pasado. Delantero uruguayo zurdo, zurdo cerrado, que formó junto con Dely Valdés una gran dupla goleadora durante 3 temporadas.
Con 19 años debutó en la máxima categoría del fútbol uruguayo. Su club, el CA Basáñez. Sus actuaciones no pasaron desapercibidas y en poco tiempo dio el salto a uno de los grandes del país: El Club Nacional de Football de Montevideo.
Fue una época dura para el conjunto uruguayo. Pese a ello, Juanchi consiguió ser dos veces máximo goleador de su país. Sus tantos le abrieron las puertas de Europa y del Real Oviedo.
Gran dupla en la capital del Principado
Su llegada al club azul coincidió con la marcha del referente en la delantera de los últimos años, Oli. El asturiano puso rumbo a Sevilla para jugar en el Betis y Eugenio Prieto llenó su vacío con dos hombres: Dely Valdés y Juanchi González para afrontar la temporada 1997-98.
La primera temporada en la capital del Principado fue, de lejos, la mejor del uruguayo: 37 partidos jugados, 36 como titular completando 26 y 9 goles. El primero de ellos fue al Zaragoza, de penalti, en la jornada 2 con un empate 3-3 al final en La Romareda.
Tras ese tanto, sus víctimas serían el Espanyol, Betis, Salamanca, Sporting, Tenerife, Real Madrid, de nuevo Salamanca y Deportivo de la Coruña.
La siguiente temporada sería mucho más irregular para el uruguayo. De hecho, en el mercado invernal se marcharía cedido al Atlético de Madrid, donde disputaría 8 partidos anotaría 2 goles. Finalizada la temporada, Juanchi volvería al Real Oviedo durante dos temporadas más.
En la 1999-00 volvió a cobrar mayor protagonismo con Luis Aragonés en el banquillo, aunque no se consiguió hacer con la titularidad. En total, 16 partidos y 3 goles al Barcelona, Logroñés y Real Madrid.
La última temporada en esta primera fase sería la 2000-01, la del fatídico descenso a Segunda. El uruguayo apenas jugaría 6 encuentros aquel año con Antic, anotando 1 gol. Precisamente anotó ese tanto en su último partido en Primera División. Fue en la jornada 32 en un Málaga 2 - 2 Real Oviedo donde tendría que retirarse lesionado.
Viaje de ida y vuelta
Con el descenso, Juanchi hizo las maletas y puso rumbo a Granada, buscando minutos y goles para recuperar las sensaciones. La aventura andaluza apenas duró un año y desde allí volvió a su país, donde jugó en CA Fénix, Cerro y River Plate. Pero todavía habría una sorpresa en su futuro.
En la temporada 2004-05, el Real Oviedo volvería a reclamar sus servicios para tratar de lograr el ascenso a Segunda División B. Juanchi González no se lo pensó y regresó a Asturias para ayudar a su equipo.
Ese año jugó 26 partidos de Liga, 2 de Copa, 4 de Copa Federación y 2 de playoff de ascenso. Anotó 9 goles y estuvo en el 11 inicial del Real Oviedo en el ya histórico 1-5 en Ávila. Habiendo cumplido su parte del acuerdo, Juanchi regresó a su país para disfrutar de los últimos años de fútbol.
Al igual que en la primera época, volvió al CD Fénix, donde se retiraría en 2007. Una larga carrera para un delantero que hizo de la potencia de su zurdo y su pelea continua sus mejore armas. Cualidades que le valieron para ser internacional por Uruguay en 4 ocasiones.
Retiro alejado del fútbol
Tras abandonar la práctica del fútbol, Juanchi regresó a una vida lejos de los focos, llegando a trabajar de conductor de autobús. En la actualidad se mantiene muy pendiente de la carrera futbolística de su hijo, Giovanni González.
Giovanni no recuerda sobre la cancha a su padre. Es diestro y se desenvuelve principalmente en el lateral derecho. Además, desde hace poco más de un mes defiende la camiseta de Peñarol, rival histórico del Nacional.
Juanchi ya ha dejado claro que no hay problema para él: «No tiene nada que ver que yo haya jugado en Nacional. Esto es por la gloria de él». Además, deja claro que «para él soy un referente y siempre estuve al lado de él dándole consejos».
