Entre vaqueros y granjeros

En A Coruña, tanto tiempo después, aún hay algún insumiso nostálgico del Far West que pretende llegar con su coche hasta la mismísima puerta del bar

Luís Pousa

¡Qué ciudad!

Uno no se puede enamorar solo de la Marina o de la plaza de Lugo, y que a esta ciudad hay que quererla en todos y cada uno de sus barrios

Luís Pousa

Gentes con nombre de calle

No sé qué comentarían algunos protagonistas de nuestro callejero si pudiésemos resucitarlos de entre los muertos y los plantásemos en la vía que luce su nombre

Luís Pousa

Montevideo y su calle secreta

La calle Montevideo de A Coruña, en la trastienda de la estación de autobuses, tiene un aire clandestino, de rebotica o catacumba

Luís Pousa

Arsenio y la Galicia de a pie

Entre las cosas que más le gustaban, andar y no darse importancia eran de las más importantes

Luís Pousa

En lo alto del ombú

Hay todo un género literario que podría resumirse así: personajes indignados que trepan a un árbol como forma de protesta

Luís Pousa

Nuestro Rafael Cadenas

Nos deslumbró con su inteligencia cervantina, insobornable y contestataria

Luís Pousa

Lo (otro) que el viento se llevó

Aquello que anotó de niño Picasso: «El viento ha comenzado a su vez y continuará soplando hasta que no quede rastro de A Coruña».

Luís Pousa

La ciudad que se quedó en casa

Para los afortunados que no hayan estado en A Coruña durante estos días, ya sea porque se fueron de viaje a Santorini o porque tienen aldea con porche y mecedora donde esconderse, les hago un resumen exprés

Luís Pousa

El bareto de barrio

Me pregunto qué habrá sido de los humildes baretos toda la vida, con sus mesas de formica recién fregadas, su barra con espejo para las piernas y su camarero respondón

Luís Pousa

Del Banco Pastor al Flatiron

Luís Pousa

La silla vacía de Nacho

Luís Pousa