Han ido abriendo puertas hasta romper el techo de cristal. Se han esforzado más que cualquier hombre para llegar al mismo sitio. Valientes, emprendedoras y bravas, despejan el camino a las que vienen detrás. No están todas, pero las que están, las 15, cambiaron el dogma en sus respectivos campos; siendo minoría, resistieron. Pisaron suelo que nunca había pisado una mujer
María Viñas