«Cuando llegó Rozada, le dije que era el mismo del año pasado y que tenía más ganas todavía», cuenta el delantero senegalés
23 oct 2019 . Actualizado a las 19:30 h.No está siendo una temporada sencilla para Ibrahima Baldé. Tras muchos rumores sobre su posible salida en el mercado estival, el senegalés se quedó en el Real Oviedo convencido de que podía recuperar su sitio. Pero no está siendo así. Después de doce jornadas disputadas, Ibra no llega ni a 15 minutos sobre el césped en los tres encuentros en los que jugó. En los micrófonos de Asturias SER Deportivos, el delantero carbayón repasó su situación.
Su momento actual
«Para mí esto es fútbol. No te puedo decir que pasó algo en concreto. Soy el mismo Ibra. Con las mismas ganas y la misma profesionalidad».
«El año pasado cuando me tocó competir lo hice de diez. Tengo la tranquilidad de que lo que depende de uno mismo es trabajar bien y luego esperar».
«Me encuentro bien. Uno cuando no juega se pregunta qué está pasando, pero desde Egea se hablaron unas cosas en el vestuario que cogí con calma y tranquilidad sabiendo que tenía contrato y quería seguir aquí».
Egea y Rozada
«A Egea le dije que qué tenía que hacer para jugar. Uno piensa que entrena bien, pero igual el entrenador piensa otra cosa. Me dijo que me veía bien y en todos los partidos me llevó convocado. No voy a decir que él no contaba conmigo».
«Rozada es un fenómeno. Me habló el primer día cuando llegó. Le dije que era el mismo del año pasado y que tenía más ganas todavía».
«No sé si tiene una bola mágica o es un brujo, pero lo que te dice acaba pasando».
Posible salida en enero y el cariño del Tartiere
«Soy jugador del Oviedo a no ser que me digan en diciembre que no cuentan conmigo, pero no creo que sea así. No merezco eso».
«No he hecho nada en el Oviedo para que la gente me quiera tanto. Por eso siempre digo que la afición merece más. Ojalá que al final este club, con Ibra o sin él, pueda subir a Primera».