Los profesores exigen reforzar plantillas y menos alumnos por aula

M.D. OVIEDO

ASTURIAS

Dos niños con su padre, paseando por Oviedo
Dos niños con su padre, paseando por Oviedo Alberto Morante

Consideran que el modelo austríaco de combinar clases presenciales y online no es la panacea para enfrentarse al COVID-19 y reclaman a la consejería negociación

18 may 2020 . Actualizado a las 20:32 h.

Los sindicatos de la enseñanza insisten en que reforzar plantillas y reducir el número de alumnos por aula son claves para iniciar el próximo curso escolar. La combinación de la docencia presencial y online para la reanudación de la actividad lectiva en los centros educativos el próximo curso o seguir el modelo austríaco de una semana en clase y dos en casa, anunciado por la consejera de Educación, Carmen Suárez, en la Junta General consideran que es una alternativa pero que requiere tener más profesorado y aligerar las ratios.

Para el secretario general del Sindicato de Enseñanza de CC OO Asturias, Borja Llorente, para hacer un plan de choque contra el coronavirus hay que basarlo «en hacer grupos de estudiantes menos numerosos y en contratar profesorado interino en paro». A ello, une la necesidad de realizar «turnos para los más mayores». El gran inconveniente que ve el dirigente sindical en el modelo austríaco es la posibilidad «de que incremente la desigualdad entre géneros», algo a lo que muestra su más rotunda oposición. «Si los hijos están dos semanas en casa, eso puede provocar que la madre va a dejar de trabajar y ahondaría en la desigualdad entre géneros», explica. En su opinión, para el próximo curso, España tiene que dotar de más recursos a la educación pública «ya ques es uno de los países de la UE que menos invierte, está por debajo del 5% del PIB en educación y hay un déficit de puestos escolares en la red pública», señala. 

Por su parte, desde Suatea, Tino Brugos, también defiende que sea cual sea el modelo elegido para el nuevo curso tiene que pasar por «reducir alumnos por aula, más plantilla, más presupuesto y profesorado de refuerzo». El representante de Suatea se pregunta «qué va a pasar si hay un rebrote del coronavirus y hay que cerrar ese centro». Por ello, considera que desde la consejería «se deberían estudiar diferentes alternativas, estar abiertos a sugerencias y entre todos, no tanto centrarse en cómo se iniciará el curso sino ver en qué respuesta va a dar el sistema». 

Desde ANPE, Gumersindo Rodríguez, afirma que «el único modelo que asegura la equidad de todo el alumnado es el presencial», que es el formato por el que apuesta su sindicato. En ese sentido, apunta que esa combinación de enseñanza a distancia y presencial «exige reforzar plantillas o bien ampliar la jornada de trabajo, es decir, doblar». En ningún caso, se aceptaría desde ANPE que «se modifiquen a peor las condiciones de trabajo de profesorado». Recuerda que el modelo austríaco se basa en una ley de 1962 y aboga por test masivos a la población escolar. «Si no se hacen, en octubre estaremos en la casilla de salida de nuevo, independientemente del modelo que se aplique», augura. «Es mucho más barato y seguro hacer test masivos que acometer la digitalización de los centros educativos, de los contenidos curriculares y dotar de equipos informáticos a profesores y alumnos», asegura.

Por su parte, la secretaría regional del sector de Enseñanza de UGT, Maximina Fernández, también considera que cualquier modelo que se quiera implantar «tiene que ser negociado» con los representantes de los trabajadores del mundo educativo. Al mismo tiempo reclama más plantilla y menos ratio, en definitiva, «más presupuesto porque la educación es una inversión no un gasto». Además, la representante de UGT señla que si hay que estudiar modelos «habrá que mirar a los países más avanzados» e insiste en la necesidad de que lo que se vaya a realizar sea fruto de una negociación «porque, por ejemplo, el teletrabajo habrá que regularlo», afirma.