Elisa Mouliaá responde a las críticas: «No necesito dinero, ni fama, tenía mi vida solucionada»

Yago Gantes
Yago Gantes REDACCIÓN / LA VOZ

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Elisa Mouliaá e Íñigo Errejón
Elisa Mouliaá e Íñigo Errejón

La actriz y presentadora que denunció a Íñigo Errejón pide a las personas que dudan de su testimonio que se lean lo que pone la denuncia: «Me da igual que no os cuadre nada. Eso es lo que pasó»

29 oct 2024 . Actualizado a las 11:38 h.

Íñigo Errejón está en silencio. Su entrada en un coche oscuro a la puerta de su casa el jueves es su última imagen. Y una carta donde explicaba que trataba así a las mujeres por culpa del neoliberalismo y el patriarcado es su última comunicación. Mientras, es un plantel de mujeres el que está en el foco de la crítica social. Desde Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno, a Mónica García, ministra de Sanidad y coportavoz de Más Madrid, o Rita Maestre, portavoz en el pleno madrileño y expareja de Errejón. Sin embargo, la actriz Elisa Mouliaá, que denunció al cofundador de Podemos por violencia sexual, es la que se está llevando la peor parte. «Obviamente me estoy arrepintiendo porque, encima, das detalles y la gente dice: "Es que no me cuadra nada". Pues a mí sí, y ya está, solo pido que me dejen en paz, que me dejen tranquila», cuenta a La Voz.

La también presentadora fue la primera mujer en interponer una denuncia ante la Policía por haber sido víctima de acoso sexual. En el atestado ante el servicio 24 horas de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) se relata que Mouliaá fue víctima presuntamente de una agresión sexual por parte de Errejón sin su consentimiento a finales del 2020: «Cerró la puerta con pestillo para impedir que la diciente pudiera escapar, la comenzó a besar y a tocar por distintas partes de su cuerpo, sobre todo la zona de los pechos y de los glúteos», dice el atestado. «A mí me pasó eso y no me parece normal; que lo juzgue quien lo tenga que juzgar, yo no sé si es delito o no, creo que sí. Que te acosen sexualmente la primera hora en la que conoces a una persona… es que no había habido una conversación previa, un tonteo o un flirteo», explica la agredida a este medio sobre lo que pasó.

Después de ese incidente, la presentadora se marchó en un coche con Errejón hasta su casa, un gesto de los que más críticas ha cosechado en redes sociales. Mouliaá ya contó en el mismo foro que no tiene ningún sentido que se fuera con él, pero no dudó en contarlo porque es lo que pasó: «Me podría haber inventado que no me fui a su casa, pero es lo que pasó, acabé en su casa como una idiota», afirma.

Este aluvión de descrédito al testimonio está afectando a la actriz. Sin embargo, lo único que pide a los que hablan sobre ella es que se lean detenidamente el escrito. «Que la gente deje de hablar sin leer la denuncia. Después de leerla, que juzguen si quieren», dice. Además, deja claro que este proceso no lo comenzó por buscar notoriedad o reconocimiento: «Yo estaba con mi vida tranquila, con mi vida solucionada, no necesito dinero ni fama. Tenía mi hueco hecho en mi trabajo y tenía mi vida solucionada. Que no me vengan a decir nada a mí. Me estoy sintiendo muy juzgada y en el foco. Esto es un escándalo y yo lo único que he hecho es apoyar».

El siguiente paso que ha dado la presentadora es buscar un abogado. Inicialmente se rumoreó que la iba a defender el letrado gallego Xaime da Pena, de dP Abogados, conocido por ser una de las personas que financió la lona contra Pedro Sánchez. Sin embargo, la actriz confirma que no es así, que está buscando a alguien especialista en el tema: «Sí que me ha llegado gente y me han recomendado, pero me tomaré el tiempo adecuado para elegir a alguien. Sobre todo quiero una mujer experta en violencia de género y en estos casos». Además, confía que haya más denuncias. «Lo que creo que va a pasar es que van a salir más casos; están esperando como aunarlo todo y ver cómo ir todas a una. Se está viendo cómo llevarlo todo», añade.

«Estaba ilusionada con él porque admiraba su discuso»

Esta mañana de martes, Mouliaá, ampliaba sus declaraciones al toparse con una reportera de la agencia Gtres en plena calle. Explicó que una de las motivaciones para denunciar surgió cuando, tras hacerse públicas denuncias anónimas hacia Errejón, se pusiese en duda a las víctimas. «Entonces reviví mi historia, sabía que era un acosador, una persona que no está bien, un psicópata narcisista y anuncié que denunciaría», asegura la actriz. «No quiero ir de vícitma porque no me afectó y no quiero que me afecte. Estaba ilusionada con él porque admiro su discurso político y me da pena que esto pase porque me parecía un partido esperanzador y bueno para España, pero he considerado que lo más importante son las mujeres. Y las que dicen que han abusado de ellas tienen razón», ha ampliado su argumentario la artista madrileña de 35 años. Han sido varias víctimas del político las que habrían contactado con ella tras presentar la denuncia, «la manera en la que actuó conmigo esa noche, por lo visto la repetía siempre».

Como mujer, Elisa alaba la regulación actual hacia este tipo de abusos. «Ahora creo que acosar a alguien sin su consentimiento es delito. Antes no lo era. Yo sé que solo sí es sí. Y van a salir todos, de un bando y de otro. Sigue habiendo machistas y van a salir más nombres. De gente de izquierdas y de derechas. De la industria cultural... gentuza hay en todos lados», ha concluido su interacción con la prensa. 

Mientras, la vía judicial del caso va tomando forma. El juez Adolfo Carretero ya ha admitido la denuncia contra el político y será citado a declarar como  investigado por un presunto delito contra la libertad sexual. La decisión se toma tras confirmar desde el Congreso que Íñigo Errejón ha dejado de ser diputado en la Cámara Baja, momento en el que Carretero se ha declarado competente para afrontar el caso. Los hechos sucedidos podrían ser constitutivos de un delito castigado con penas que van de 1 a 5 años de cárcel. 

Por el momento, ha sido otra mujer, Loreto Arenillas, representante en la Asamblea de Madrid y exjefa de gabinete de Errejón, la que se ha visto afectada por los hechos acaecidos. Ha dejado su acta de diputada tras ser cesada de todos sus cargos en Más Madrid porque habría mediado con una joven para que no denunciara al político. Sin embargo, la política madrileña ha cargado contra su partido, asegurando sentirse como un «chivo expiatorio». 

Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno y la persona que alzó a Errejón a la portavocía de Sumar en el Congreso,  ha asegurado este lunes que conoció el pasado martes por la noche las acusaciones de agresiones sexuales. En cuanto a otro incidente que circuló en redes sociales en verano del 2023 en Castellón, la también ministra de Trabajo ha dicho que no llegó a intervenir porque preguntó a Podemos y Más Madrid, que abrió una investigación interna. Y luego comunicaron a su equipo que el expediente se había cerrado y que la denuncia se borró. «Nunca más volví a saber nada de este hecho», ha zanjado.