Trump, víctima del primer intento de magnicidio en cuatro décadas en Estados Unidos: «Se supone que debo estar muerto»
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El magnate aseguró en una entrevista que vivió una «experiencia surrealista». «Lo más increíble fue que no solo giré, sino que giré en el momento exacto», afirmó. En el coche del autor, que fue abatido, se halló material explosivo para fabricar bombas caseras
15 jul 2024 . Actualizado a las 09:26 h.La vida política de Donald Trump, magnate neoyorquino y expresidente de los Estados Unidos, sigue escribiendo capítulos históricos en la que todavía es la primera potencia mundial. El sábado, el magnate se convirtió en el primer expresidente víctima de un intento de asesinato desde los años 80. El incidente, que tuvo lugar durante un mitin de Trump en Butler, Pensilvania, se saldó con un asistente al acto muerto y dos heridos, y con la evacuación del candidato, que también resultó herido, aunque de poca gravedad.
El agresor, que fue neutralizado en cuestión de minutos por un francotirador del Servicio Secreto, estaba situado sobre un tejado, a unos 120 metros del atril donde hablaba el candidato. El hombre identificado por el FBI como Thomas Matthew Crooks, de 20 años, estaría registrado como republicano en Pensilvania y, de momento, consta como que carece de antecedentes penales. Las razones que llevaron a Crooks a atentar contra la vida del candidato republicano aún se desconocen, como reconocía el agente especial del FBI al cargo de la investigación, Kevin Kojek, el sábado por la noche (domingo en España).
Según las autoridades, el atacante habría empleado un rifle de asalto AR-15 para disparar contra el expresidente. Un arma que ha sido objeto de intensa polémica en Estados Unidos por su uso indiscriminado en los tiroteos masivos que asolan el país anualmente y que elevan el número de víctimas por arma de fuego a varios centenares cada año.
El domingo por la mañana, la zona en la que tuvo lugar el evento permanecía clausurada mientras las fuerzas de seguridad continuaban con las pesquisas. Además, los investigadores mantenían también acordonados los alrededores del domicilio del supuesto atacante en Bethel Park, una zona de suburbios situada a unos once kilómetros de Pittsburgh y a 64 de Butler, donde tuvo lugar el mitin del republicano. Según informaba The Wall Street Journal, las autoridades descubrieron artefactos explosivos en el coche de Crooks estacionado cerca del lugar del evento, y materiales para fabricar bombas en su domicilio. Las autoridades aún no han descartado que hubiese más personas involucradas en el ataque.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está al tanto de la marcha de las investigaciones y el fiscal general, Merrick Garland, canceló el domingo sus compromisos para coordinar la investigación sobre el intento de asesinato perpetrado contra Trump.
Las circunstancias del ataque arrojan serias dudas sobre la actuación del Servicio Secreto a la hora de asegurar la zona con anterioridad a la celebración del evento. Sobre todo se cuestiona cómo el autor habría sido capaz de posicionarse en un tejado a poco más de un centenar de metros del lugar desde el que hablaría el exmandatario sin despertar las sospechas de los agentes encargados de la seguridad del evento. Unas circunstancias que el domingo inspiraban la petición del presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Mike Turner, de abrir una comisión de investigación sobre el incidente.
El mitin de Donald Trump, que terminó convirtiéndose en escenario del intento de asesinato contra el expresidente, habría sido el último del candidato antes del inicio de la Convención Nacional Republicana del 2024 el lunes en Milwaukee.
El magnate: «Se supone que debo estar muerto»
Donald Trump ha llamado a la unidad de los estadounidenses tras el atentado que sufrió en un mitin el sábado por la tarde en EE.UU. El expresidente ha adoptado un tono de moderación para referirse al ataque contra él en Pensilvania.
Horas después de ser víctima del ataque, el expresidente publicó una declaración a través de Truth, la red social de su propiedad, en la que agradecía al Servicio Secreto y a las fuerzas de seguridad «su rápida respuesta». Trump también ofreció sus condolencias a los familiares del seguidor fallecido y de los heridos por los disparos. Según el exmandatario, durante el atentado «sentí la bala desgarrándome la piel», declaró en el mismo canal, momento en el que se habría dado cuenta de «lo que estaba pasando».
El expresidente de Estados Unidos ha afirmado este domingo durante una entrevista con el New York Times que «se supone» que debería «estar muerto» después de sobrevivir a un intento de asesinato durante un mitin en Pensilvania que ha calificado de «experiencia muy surrealista». «El médico del hospital dijo que nunca había visto algo así, lo llamó un milagro», ha explicado en su avión privado a bordo a Milwaukee (Wisconsin) para participar en la Convención Nacional Republicana que certificará su candidatura a la Casa Blanca.
Trump llevaba durante la entrevista un vendaje blanco que le cubría la oreja y el personal insistió en que no le tomaran fotografías. «Se supone que no debo estar aquí, se supone que debo estar muerto», ha subrayado, antes de señalar que lo estaría si no hubiera girado ligeramente la cabeza hacia la derecha para leer un cartel. «Lo más increíble fue que no solo giré, sino que giré en el momento exacto», dijo Trump el domingo por la tarde en una charla a bordo de su 757 mientras volaba a Milwaukee para el inicio de la Convención Nacional Republicana.
El magnate ha aseverado que mientras los agentes del Servicio Secreto le sacaban del escenario, él quería seguir hablando con sus simpatizantes, pero le dijeron que no era seguro y que tenían que llevarlo a un hospital. «Quería seguir hablando, pero me dispararon», dijo el magnate. «Es una experiencia muy surrealista, y nunca sabes lo que vas a hacer hasta que sucede algo así».También ha asegurado que durante las labores de las fuerzas de seguridad le «golpearon tan fuerte que» se le cayeron los zapatos.
Por otro lado, ha aprovechado la ocasión para agradecer a los agentes que le protegieron y abatieron al tirador. «Le mataron de un tiro entre los ojos. Hicieron un trabajo fantástico. Es surrealista para todos nosotros», ha añadido. «Mucha gente dice que es la foto más emblemática que han visto jamás. Tienen razón y no morí. Normalmente hay que morir para tener una foto emblemática», ha agregado al comentar la emblemática fotografía en la que sale levantando el puño mientras dijo «Lucha» varias veces.
En otra entrevista con el periódico Washington Examiner, el exmandatario ha asegurado que ha reescrito por completo su discurso para la convención con el objetivo de abordar este momento y abogar por la unidad del país. «Esta es una oportunidad de unir a todo el país, incluso a todo el mundo. El discurso será muy distinto, muy diferente de lo que habría sido hace dos días», ha afirmado.
El ataque, en el que Trump resultó herido leve en su oreja derecha después de que la bala la rozara, se saldó con la muerte de un simpatizante y con otros dos heridos, que han sido hospitalizados. El atacante, identificado como Thomas Matthew Crooks, de 20 años, fue abatido segundos después por un francotirador del Servicio Secreto en el tejado desde el que efectuó los disparos.
En un segundo comunicado hecho público el domingo por la mañana, Trump agradeció las oraciones de sus seguidores y llamó a los ciudadanos del país a «mantenerse unidos» y a demostrar cuál es el «verdadero carácter» de los estadounidenses manteniéndose «fuertes y decididos» e impidiendo que «gane el mal». Con este mensaje, el candidato a la Casa Blanca también aprovechó para confirmar que hablará en el marco de la Convención Nacional Republicana en Milwaukee. Trump, afirmó, además, que había sido Dios el que le salvó de perder la vida durante el atentado.
También este domingo se pronunciaba la esposa del expresidente, Melania Trump, que afirmaba que al ver el atentado contra su marido entendió que su vida y la de su hijo Barron «estaban al borde de un cambio devastador».
La ex primera dama afirmó que el atacante era «un monstruo» que habría reconocido al candidato republicano como una «máquina política inhumana» tratando de «acallar la pasión» de su marido. Melania Trump también llamó a los estadounidenses a «ascender por encima del odio, y las ideas de mentes simples que prenden la violencia».