Bernardo Álvarez llevó a cabo en 2023 una protesta a modo de vía crucis por el «injusto» cierre de su local. Va a denunciar tanto al Principado de Asturias como al Ayuntamiento de Grado, que fueron quienes «concedieron las licencias e hicieron todos los estudios». «En el local estoy pagando 1.600 euros de hipoteca todos los meses por algo que no puedo ni abrir», lamenta