Un gol de Cristiano a pase de Özil decantó el clásico, y el campeonato, a favor del conjunto merengue; el Barcelona no se encontró cómodo sobre el césped en ningún momento del partido
Khedira adelantó a los blancos en la primera parte, Alexis consiguió empatar ya en la segunda y dos minutos después Cristiano colocó al Madrid de nuevo por delante en el marcador.
El equipo blanco se olvida de jugar tras el empate de Özil y sufre para volver al Bernabéu con un resultado que convierte en factible entrar en la final de la Champions