El club sigue adelante con su política de cantera
13 jun 2023 . Actualizado a las 23:13 h.Sin prisa pero sin pausa. El Real Sporting de Gijón afronta días clave en la organización interna del club de cara al año que viene en lo que atañe a su cantera. Desde la pasada temporada se lleva cocinando la posibilidad de crear un segundo filial, una especie de «Sporting C», que termine de dar sentido al proyecto que el Grupo Orlegi pretende desarrollar en la Escuela de Fútbol de Mareo. Un paso lógico a la hora de vincularlo con la Academia Elite, que pretende ser una importante fuente de ingresos en la Escuela, así como al contribuir a la idea de ir adelantando ciclos en las etapas formativas, algo para lo que también están trabajando tratando de convencer al fútbol base para tramitar una propuesta de un cambio de normativa.
Trámites complejos y largas negociaciones que están a su vez frenando otras operaciones de cara al futuro de los principales equipos de la cantera rojiblanca, si bien se trabaja día a día a alto ritmo por ir encajando todas las piezas del puzzle. También en lo deportivo, por ejemplo, al confirmar en las últimas fechas la salida de hasta 4 futbolistas que formaban parte del segundo equipo. Todo ello a la par de unas obras que han acelerado su avance desde el inicio de las vacaciones de las diferentes plantillas para tratar de tener todo preparado de cara al tramo final de la pretemporada.
Sin embargo, el Sporting trabaja con fechas marcadas de manera externa. En las oficinas de Mareo tienen que cerrar y regularizar con la Real Federación Fútbol del Principado de Asturias la situación del Sporting C antes del cambio de mes, con un plazo marcado hasta el 30 de junio. Óscar Garro, al frente de las operaciones, debe concretar todo el papeleo en los próximos 17 días para que el club pueda cumplir con uno de los ejes de su proyecto de cantera a corto plazo. Así lo establece el reglamento general de la Real Federación Española de Fútbol en su artículo 109, referido a las relaciones de filialidad entre clubes:
1. Los clubes podrán establecer entre sí convenios de filialidad, siempre que pertenezcan a la misma Federación de ámbito autonómico, que el patrocinador milite en categoría superior a la del patrocinado y que éste obtenga la expresa autorización de su Asamblea, extremo éste último que deberá notificarse a la RFEF y a la Federación de ámbito autonómico respectiva, según se trate de clubes nacionales o no.
2. La relación de filialidad sólo podrá convenirse al término de la temporada de que se trate, debiendo formalizarse por escrito firmado por los Presidentes de los clubes afectados, que se trasladará a la RFEF y la Federación de ámbito autonómico respectiva, a más tardar antes del 30 de junio para que tenga efectos en la siguiente temporada.
3. La situación de filialidad tendrá la duración que expresamente se establezca en el correspondiente convenio, y se entenderá finalizada a su vencimiento. A tal efecto, no se admitirán convenios que no recojan la duración de mismo, que deberá ser por temporadas completas
4. El vínculo de filialidad no podrá resolverse en el transcurso de la temporada y, al término de la que se produzca tal resolución, ésta no enervará, para la inmediatamente siguiente, las consecuencias competicionales derivadas de la condición de patrocinador y filial en que actuaron los clubes.
5. Los clubes filiales no tendrán la misma denominación que la del patrocinador, y éste sólo podrá disponer de uno de aquéllos en cada una de las divisiones de las categorías nacional y territorial, excepto tratándose de las de juveniles o de las inferiores a éstas.
6. Ningún filial podrá ser patrocinador de otros.
Un reglamento que ha sido inspeccionado de arriba a abajo en Mareo para tener todo en orden en el plazo exigido, con una fórmula que apunta a la absorción de un club gijonés como el Racing de La Guía. El conjunto rojiblanco participó este curso en Segunda RFFPA, dos categorías por debajo de la Tercera RFEF en la que militó el Sporting B y que es el primer escalón nacional, aunque divididos en grupos autonómicos. Los gijoneses no lograron inicialmente el ascenso de categoría, pero un cambio en las Normas Reguladoras y las Bases de Competición que se espera aprobar el próximo 1 de julio en Asamblea, acometerá una reestructuración de las categorías haciendo que la Tercera RFEF tenga dos equipos más. Esto hará que tanto el Condal como el Avilés Stadium, que habían descendido ambos a Primera RFFPA, seguirán compitiendo en Tercera RFEF, generando un arrastre para cubrir las dos plazas que se generan en Primera RFFPA. Ahí es donde entra en juego el Racing de La Guía, que al finalizar como tercero en su liga, al borde de los puestos de ascenso, terminaría ocupando una de esas plazas en el escalón inmediatamente posterior a la Tercera RFEF, siendo el mejor escenario para los intereses del Sporting.