Segunda parte de la entrevista del central con La Voz de Asturias
02 jun 2022 . Actualizado a las 13:31 h.Tras conocer su lado más personal y su relación con los medios, en esta segunda entrega de la entrevista que Jean-Sylvain Babin solicitó a La Voz de Asturias, el central aborda no solo su paso por el Real Sporting de Gijón en una larga trayectoria que llevó a disputar 170 partidos oficiales con la señera rojiblanca, sino también el presente y el futuro del club, con las decisiones que se tomaron y que se deben tomar y que corresponden, entre otros, al actual técnico gijonés Abelardo Fernández.
"Entiendo perfectamente que quieren hacer un cambio. Soy un tío de fútbol y lo entiendo. Si yo estuviera en la situación del míster, Javi Rico o el Presidente buscaría ese relevo generacional.”
Esto no es todo, pues aún queda una tercera parte para cerrar la larga entrevista que concedió el central internacional de Martinica con Sporting1905 y que verá la luz próximamente.
¿Se puede entender la llegada de Abelardo como un paso adelante en cuanto a la planificación de un proyecto?
“Sí, así lo creo. El Pitu se merece todo en el club. Fue un gran jugador, ascendió con los guajes, nos vino a salvar la papeleta en los últimos 4 partidos. Estoy súper convencido de que va a mejorar muchas cosas. Sabe más que nadie ahora mismo en el club y hay que dejarle trabajar y así lo van a hacer.”
Abelardo vino a decir estos días que iba a hacer una limpieza de vestuario, que quería una plantilla con ambiente sano y muy profesional. ¿Qué te parecieron esas frases?
“Yo en su situación y la de Rico haría un cambio radical de la plantilla. Pitu tiene mi total apoyo aunque yo ya no esté en el club. Hay que hacer cambios porque se necesita. En cuanto a lo de la profesionalidad, volvemos un poco a lo de Javi Fuego, hay quienes tienen que entender que al final vuelan cabezas, que no se puede permitir que el Sporting acabe el 17 en Segunda División. No puede ser. Algunos tienen que verlo y tomar responsabilidad.
Como dice el Pitu, hay que ganar en profesionalidad. Espero por el bien del Sporting que Abelardo lo consiga. He estado dentro y soy exigente, conmigo el primero, pero lo de esta temporada no puede ser.”
En cuanto a la preparación física el Sporting ha cambiado muchas veces de encargado en esa área, ¿Tú cómo ves que esto sea así?
“Pues como sucede con los entrenadores. Para mí tienen que quedarse lo máximo posible. Cada uno tiene su forma de trabajar y es un tema vital, desde el primer equipo a las categorías inferiores. Tú ves el físico de los canteranos de otros clubes como los vascos y están mucho más preparados a nivel corporal, y eso es algo que se puede trabajar, pero claro, si estás cambiando cada dos por tres es muy difícil tener una línea de conducta a seguir. Con Abelardo se van a cambiar muchas cosas, él mismo lo dijo, y en ese sentido soy bastante optimista de cara al futuro del Sporting.”
El otro día hubo una manifestación pidiendo la venta del Sporting y la dimisión de la directiva, es la enésima en décadas. ¿Qué crees que le falta a este club para regresar al lugar que le corresponde?
“Es un cúmulo de cosas, pero creo que todos podemos hacer las cosas mejor, desde abajo hasta arriba. No los empleados del club, pues ellos son lo grande del club. Pero lo sabemos todos, directiva, jugadores, entrenadores, servicio médico... Todos podemos dar un paso más por el bien del Sporting. Yo ahora lo veo como un aficionado más del club, y creo que es importante que no se den tantos golpes de timón a lo largo de las temporadas, tantos bandazos.
Sé que cuesta porque hay mucha presión y se va en contra del Presidente, pero la culpa no es solo suya, es una parte al igual que la culpa que tiene Babin. Con los entrenadores se debe tener más paciencia, salvo situaciones extremas, que haya tenido tantos entrenadores en mis 5 años aquí no es bueno.”
Muchas veces los futbolistas os reprimís para contar las cosas, pero ¿Cómo valoras tus diferentes etapas en el Sporting?
“Llegué en 2016 de la mano de Nico Rodríguez, que me había tenido 4 años en el Alcorcón y también contaba con el aval del Pitu, que habíamos hablado por teléfono antes de firmar. Tendría una competencia sana con Amorebieta y Meré. Sin embargo, me fui con la selección y tuve un problema físico en el sóleo, con recaída, y no fue una situación fácil con una lesión tan compleja.
Después llegó Rubi, tuve muy buen feeling con él, fue el mejor a nivel de metodología en mi etapa aquí junto a Gallego. Me gustó mucho su forma de trabajar y la del cuerpo técnico. Por desgracia bajamos y la dirección deportiva decidió cambiar de entrenador, aunque como ya dije yo prefería que siguiera. Creo que esa fue mi peor temporada de las 5 que jugué aquí.
A mi vuelta, Baraja hizo mucho para que me quedase, además de los capitanes, Mariño y Carmona. Me dio importancia y disfruté muchísimo de aquella etapa. Los resultados no llegaron y se apostó por José Alberto, otro entrenador al que tengo mucho cariño, aquel año fue el mejor a nivel personal, pero no llegamos al playoff.
Luego con Djukic acabé la temporada lo mejor que pude, pero sin cumplir los objetivos y a nivel de desgaste fue una campaña similar a esta última, además en tiempos de Covid, el fallecimiento de mi padre.. Esa liga fue muy rara. La llegada de Gallego fue un balón de oxígeno. Lo primero que le comenté es que se parecía mucho a Rubi en los entrenamientos y compaginamos muy bien. La 20/21 también fue una gran temporada para mí, aunque fue una pena no entrar en playoff.
Con Gallego jugamos de cine muchos tramos de la temporada, recuerdo el partido en Mallorca, por ejemplo. Veía venir que esta segunda temporada no sería tan buena como la primera, aunque no imaginaba que sería como para acabar el 17º. David pidió ciertos perfiles de fichajes que no le llegaron, aunque en el club hacen lo que pueden con el presupuesto que tienen.
La marcha de Javi Fuego fue muy dañina para el vestuario, para David el primero. Un grandísimo excompañero, un líder dentro y fuera del campo y un ejemplo para los chicos de la cantera.
El círculo se cierra como empezó en mi caso, con el 'Pitu', aunque con la desgracia de no poder estar disponible para trabajar con él. Una larga etapa de muchas alegrías, también sufrimientos, pero lo que me llevo es el cariño de la gente, los empleados del club, la directiva, todos los entrenadores, compañeros y excompañeros, los periodistas también.. Estoy eternamente agradecido a todos.”