La salida de Carlos Carmona provoca un cambio de ciclo
12 jun 2021 . Actualizado a las 20:09 h.La salida de Carlos Carmona del Real Sporting de Gijón abrirá durante la pretemporada el melón de quién debe portar el brazalete de capitán en la escuadra asturiana.
Por lo general, el criterio de antigüedad es el que viene rigiendo la decisión en el vestuario de Mareo y pone el foco sobre Pablo Pérez, Babin y Diego Mariño, siendo el gijonés el jugador que más temporadas acumula en el vestuario rojiblanco al haber debutado en 2014 con el primer equipo sportinguista. A su vez, los técnicos no suelen ser partidarios de que los guardametas luzcan el brazalete en competición al encontrarse generalmente más alejado de la zona arbitral y estar llamado a ser el interlocutor oficial con los colegiados.
La salida del capitán en la sombra
Por otro lado, la marcha de Javi Fuego del vestuario asturiano al finalizar su contrato también provoca que David Gallego pierda a un líder de grupo, que incluso llegó a vestir el brazalete en Fuenlabrada a modo de homenaje y reconocimiento por parte de sus compañeros. Las indicaciones tácticas y las palabras del poleso para mantener la concentración colectiva eran habituales y constantes en cada partido del Sporting, incluso cuando el futbolista no formaba parte del once y veía el encuentro desde la banda.
Joaquín Alonso como referente
El actual responsable de relaciones institucionales explicó en su día el significado de un capitán dentro del vestuario.
"Ser capitán es mucho más que llevar el brazalete o pasar por el vestuario del árbitro a firmar el acta del partido o hacer el sorteo de campo. Lo primero es predicar con el ejemplo, ser el primero en demostrar que el respeto se consigue y se gana con el trabajo y el esfuerzo, pero no sólo los días de partido, sino también en los entrenamientos de cada día. Uno no debe sentirse líder, sino pensar en que está para ayudar a los demás. También considero muy importante es que hay que ser muy positivo, comprometido y ser capaz de disfrutar y vivir con pasión el fútbol"
"Es muy importante que el capitán tenga credibilidad con los jugadores y también una buena sintonía con el cuerpo técnico y con los dirigentes del club. Que sean personas honestas y en las que se puede confiar, ya que van a ser los representantes y portavoces de sus compañeros. Con esta base y una buena actitud frente al conflicto, cualquier problema que surja siempre va a tener solución o al menos se va a buscar el camino para encontrar esa solución. Por eso es importante que la comunicación sea cercana con el compañero, para que este ante cualquier situación adversa que tenga, busque su apoyo para encontrar soluciones. Por eso es importante la comunicación fluida y cercana para crecer como grupo y hacer un equipo fuerte"
"Muchos de los problemas en un equipo de fútbol vienen asociados al rendimiento deportivo, en estas situaciones hay que saber asumir los errores y buscar soluciones en conjunto. Todo parte por un correcto diálogo. Un grupo fuerte, unido y con buen ambiente casi siempre suele ser consecuencia de las buenas relaciones de los componentes, esto es fruto de la claridad a la hora de expresar sus puntos de vista y opiniones, por eso es importante la inteligente escucha del capitán a la hora de manifestar sus compañeros estas situaciones, porque él va ser el interlocutor con las personas que tienen la capacidad de gestionar el día a día"
"En mi experiencia particular los éxitos deportivos que conseguimos, siempre fueron consecuencia de la cohesión del grupo, por encima de las individualidades, incluso habiendo jugadores muy determinantes en aquellos momentos, que sabían integrarse en el equipo y nos hacían a todos mejores. Por eso, mi consejo a los capitanes es buscar esa cohesión del grupo y hacer que el ambiente del vestuario sea muy bueno y seguro que de esta manera se conseguirán éxitos".
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