Artículo de opinión sobre el Zaragoza - Sporting
08 ene 2020 . Actualizado a las 18:42 h.El debut de Miroslav Djukic al frente del Real Sporting de Gijón no pudo empezar peor, no vamos a engañar a nadie, todos sentimos los mismos deseos de destrozar la televisión al ver un gol en contra al minuto 1. Sin embargo, existen 7 motivos para creer en este nuevo proyecto a pesar de la derrota por 2-0 frente al Real Zaragoza:
Reacción
A nivel de juego y competitividad, el equipo no le perdió la cara al encuentro tras el primero ni el segundo gol en contra. En líneas generales, se ha visto un Sporting más fuerte a nivel mental y se trata de un avance notable en ese sentido para una plantilla con los brazos caídos durante el 2019 ante el menor problema.
Más ocasiones de gol
El casillero a 0 no debe tapar la realidad y es que el Sporting pocas veces había generado ocasiones de gol tan claras lejos de El Molinón durante el pasado año. Entre los dos disparos al larguero y el remate fuera de Manu García, así como otras oportunidades de gol bastante interesantes, bien se pudieron sumar varias dianas. Le jugó de tú a tú a un candidato al ascenso en su casa a nivel de llegadas.
Los cambios
Más allá de la entrada de Cristian Salvador por la lesión de Damián, se puede decir que como mínimo, Isma Cerro y Hernán Santana estuvieron al nivel de los titulares, algo que de por sí, ya sería reseñable teniendo en cuenta las pobres aportaciones procedentes desde el banquillo en las últimas semanas. Siendo más optimistas, para gustos colores, también se puede añadir que ayudaron a ver ese Sporting atrevido que no le perdió la cara al partido.
Mermados
La gripe no se debe usar como excusa, pero sí se puede poner en relieve que los mejores minutos del Sporting llegaron en la segunda parte a pesar de que los médicos aseguraron días atrás que no se vería a los jugadores ni al 80% de su capacidad física por el proceso gripal. Sin entrar en el tiempo derrochado en viajar días atrás a Zaragoza para acto seguido regresar o preparar los entrenamientos previos con gente enferma y recibiendo partes médicos sobre la marcha.
Defensa
Ayer se pudieron escuchar muchas críticas a la zaga del Sporting y siendo cierto que los errores en los goles del Zaragoza, además de en el disparo de Luiis Suárez al larguero, fueron groseros, no se debe olvidar que el club rojiblanco viene siendo uno de los conjuntos menos goleados de la categoría. Además, Djukic está intentando implantar nuevos conceptos defensivos en Mareo para desarrollar esa línea y se requiere de tiempo para el proceso. Sin olvidar que frente al Elche ya estará disponible Marc Valiente, central con el que ya trabajó en el Partizán y el Valladolid, siendo una pieza clave.
Otro estilo de juego
La novedad no fue digna de un reality show de cambio radical, aunque sí se notó un intento por sacar mejor el balón desde atrás, por aprovechar más las bandas, por tratar de dominar los tiempos del partido y por finalizar más jugadas. El Sporting sumó más pases que el rival y se aumentaron los porcentajes de acierto. No obstante, queda mucho camino por recorrer en esa dirección.
El efecto de un entrenador no solo lo marca el primer resultado
Los nombres del Valladolid y Marcelino García Toral suenan mucho por Gijón en los últimos años y son un buen ejemplo de que un bache inicial no implica perder la guerra. El Valladolid de Sergio comenzó perdiendo frente al Sporting, también por culpa de un gol precoz, y acabó ascendiendo, a la par que creando un proyecto en Primera división y con muy pocos recursos. En el caso del entrenador asturiano, su primer partido con el Villarreal fue una derrota por 5-0 frente al filial del Real Madrid y desde entonces apenas perdió más partidos esa temporada.
Nota para Djukic y su cuerpo técnico
Aprobado. Se han visto diversas mejoras respecto a la etapa final de José Alberto y más allá del resultado en contra, no se deben tapar, aunque tampoco sea momento de echar las campanas al vuelo.
No debemos olvidar que lo que la naturaleza no da, Djukic no presta. La plantilla tiene carencias y la misión del serbio se centra, por ejemplo, en llegar más veces al área rival y con más hombres. Por contra, la puntería depende de los protagonistas sobre el verde en gran medida y falla hasta en las mejores casas, por más que se hayan hecho horas extra en Mareo al respecto.
