El Sporting gana (1-0) y pone fin a la crisis en El Molinón. Alegría, tres goles en tres partidos, reanima al equipo
15 jul 2019 . Actualizado a las 11:22 h.Quizá demasiado tarde y, también, quizá no para siempre pero el Sporting ha recuperado la Alegría. En un buen partido general, excepcional por parte del delantero extremeño, el equipo rojiblanco ganó (1-0) al Almería y corrigió la crisis local, después de tres derrotas consecutivas. Victoria que ayuda a mejorar algo las expectativas, aunque exige la máxima cautela para no olvidar que el play off sigue siendo algo menos que un milagro.
Por obligación, sin su soldado de confianza, Salvador, José Alberto decidió asumir que en esta plantilla no hay un segundo Cristian. Sin el promocionado, al técnico rojiblanco le entró la madre de las dudas para rearmar el centro del campo en la búsqueda de un acompañante para el ahora insustituible Isaac Cofie. Sin mucha confianza en el inquieto Sousa, el elegido sería Nacho Méndez, que se situaría dos pasos por delante para dejar liberado al africano como ancla.
El mejor Sporting de los últimos meses
Aliviado por su contexto, el Sporting, más liberado que nunca, compitió de forma más ordenada y natural que en los últimos sábados. Coherente en su propuesta, convencional pero efectiva, el plan de José Alberto era agarrar el balón y salir directos a los dos avanzados: Djurdjevic y Álex Alegría.
El extremeño es un jugador feliz en Gijón. Su aportación crece con el paso de las jornadas. Cada contacto con el balón de Alegría mejora la jugada, justo al contrario que sucede con Aitor, tan impetuoso como improductivo. Todo el peligro llegaba de una maniobra de Álex, pero Uros, rápido para descabalgarse de sus rivales, tenía un día goleador como los de hace no demasiado tiempo.
Menos entusiasmo -e impacto- genera el fútbol acelerado de Aitor García. El andaluz, afanado en hacer en cada jugada el gol de su carrera, se pasa cada partido jugando el suyo propio. En cuarenta y cinco minutos ejecutó cuatro disparos, todos con la misma repercusión: ninguna. Su autoestima está disparada, su rendimiento, todavía, en lista de espera.
El descanso desactivó el correcto ejercicio del Sporting. Algo fatigado y sin el premio del gol, el equipo rojiblanco pagó su inercia y aceptó un rol más secundario. El Almería, un equipo metódico, muy meritorio, empezó a entrar más en juego y a asomar por los costados, con Corpas y Rioja, dos extremos de verdad. Pero, coincidiendo con el peor momento para los locales, el jugador más en forma del proyecto, el deseado de Miguel Torrecilla, Álex Alegría, golpeó, casi sin querer, de espaldas al gol. Tercer Bingo en tres jornadas.
El gol fue una vacuna para el resto del partido. Tranquilizó al equipo, solidario en los repliegues, y conectó, después de semanas de hastío, a la grada. No dejó nunca de intentarlo el Almería, un conjunto quizá no muy resultón pero muy trabajado y que a estas alturas está donde está a base de merecimientos. No pasó mucho más en el partido porque así lo quiso el Sporting, en su mejor versión de los últimos meses, muy mejorado con la presencia de dos delanteros y con el rendimiento de Alegría, el hombre que al menos pospone la tristeza.
Alineaciones
Real Sporting: Mariño; Geraldes, Álex Pérez, Peybernes (Cordero min 86), Molinero; Carmona, Cofie, Nacho (Sousa min 92), Aitor (Traver min 61); Djuka y Alegría.
Almería: René, Romera (Narváez min 67), Martos, Saveljich, Juan, De la Hoz (Chema min 81), Corpas, Juan Carlos, Rioja, Eteki (Demirovic min 70) y Álvaro
Goles: 1-0 Álex Alegría (min 65)