Taxistas que se pasaron al Tesla: «Si no puedes instalar un cargador en tu garaje es complicado tener un coche eléctrico»
LA VOZ DE OVIEDO
Jaime y Francisco tienen un Model 3 que les está permitiendo un ahorro «monumental» en su día a día. Sin embargo, siguen encontrando inconvenientes a este tipo de vehículos: de la «mejorable» autonomía a la red de carga, con puntos gratuitos «muy lentos» o de pago que llegan a ser «muy caros»
22 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Cada vez más asturianos optan por los coches eléctricos. Y aunque no se puede hablar de tendencia porque el número de estos vehículos sigue siendo reducido en la región, hay un goteo constante de matriculaciones. El año pasado fueron 730 los automóviles de este tipo que se adquirieron en Asturias, según los datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). El porcentaje que representan sobre el parque móvil total de la comunidad se mantiene bajo, pero es común verlos en la calle e incluso subirse a ellos. Porque en ciudades como Oviedo es cada vez más común ver taxis completamente eléctricos.
Jaime Cuendias y Francisco Campos son dos de los conductores que apostaron por motores eléctricos después de hacer una transición inicial de la combustión convencional al coche híbrido. Ambos realizan su trabajo a bordo de un Tesla Model 3. Adquirir el vehículo supuso un importante desembolso económico, pero a la larga es una inversión rentable, pues el ahorro, aseguran ambos, es «monumental».
Ninguno de los dos se arrepiente de haber dado este paso. El ahorro y la comodidad con la que desarrollan su día a día pesan más que los inconvenientes que aún acarrean estos vehículos. Desventajas que los dos han tratado de solventar, en primer lugar, con la instalación de enchufes de carga en sus propios garajes. Pues uno de los principales hándicaps de estos coches sigue siendo la red de electrolineras.
Jaime Cuendias lleva dos años y cuatro meses con su Tesla Model 3. Se confiesa apasionado de los coches en general y, tras trabajar con un vehículo híbrido, dio el paso al cien por cien eléctrico. «Había leído mucho sobre ellos y vi que tenían menos mantenimiento y ahorraban gasolina. También seguía la marca Tesla y a nosotros cada vez nos exigen que nuestros vehículos contaminen menos, por lo que me decanté por ello», cuenta.
Dos años y más de 130.000 kilómetros después, Jaime está «encantado con él». La inversión fue importante, pero «el cambio fue a mejor y el ahorro se nota mucho». Tanto, que pone cifras: con el Toyota híbrido con el que trabajaba anteriormente gastaba entre 500 y 600 euros mensuales en gasolina, ahora la factura se ha reducido a 60 o 70 euros que paga de luz por cargar el coche en su propia casa durante la madrugada. «Sí son más caros, pero el ahorro merece muchísimo la pena. Un vehículo eléctrico tiene un ahorro monumental, es muy rentable», determina.
Su coche tiene una autonomía de 400 kilómetros y lo carga todos los días en su garaje, independientemente de si se queda o no sin batería: «Tengo que cargarlo siempre, porque al día siguiente saldría con la mitad de batería y me vería muy limitado», asegura Jaime. Este taxista ovetense también ha hecho viajes largos, aunque ese es el gran inconveniente que a su juicio tienen estos coches: «No es que no puedas hacer estos viajes; yo he ido a Cádiz y no he tenido ningún problema. Pero claro, no puedes llegar en el mismo tiempo que lo harías con un vehículo de combustión», reconoce.
Su experiencia hace que recomiende a otros conductores este tipo de vehículos, sobre todo a los profesionales del taxi, como es su caso. Sin embargo, cree que la clave está en disponer de cargador propio. «Tristemente, a día de hoy, si no puedes instalar un cargador en el garaje de tu casa, veo un poco complicado tener un vehículo eléctrico», subraya. Porque lo mejor es, a su juicio, «llegar a casa, enchufarlo y cogerlo al día siguiente, sin perder el tiempo».
Su compañero Francisco Campos tiene una experiencia muy similar, aunque lleva menos tiempo con su Tesla Model 3. Hace poco más de un año que empezó a circular con él como taxi y el balance también es positivo: «Lo que más me movió es el tema del ahorro, pero, aparte, las sensaciones que tienes al conducir un coche de estos son muy buenas, no tienes vibraciones, no hay ruidos… Parece que sales más relajado a trabajar», explica. Además, influyó en su decisión el tema de que sea un vehículo sin emisiones.
Antes, al igual que Jaime, tuvo un híbrido. Reconoce que cambiar a un coche cien por cien eléctrico supone un desembolso grande, pero en su caso «la recuperación de la inversión es bastante rápida». Además, asegura que son automóviles «tecnológicamente muy avanzados» y está satisfecho. También tiene cargador en casa y una tarifa que le permite enchufar el coche de madrugada a un coste muy bajo, por lo que el ahorro respecto a un motor diésel o gasolina es más que notable.
Para Francisco sigue habiendo hándicaps sobre estos coches, aunque los recomienda. El primero es que «en Oviedo no hay concesionarios de Tesla; si tienes cualquier percance, tienes que desplazarse a Bilbao o a Madrid», asegura. Pero, a su juicio, el principal inconveniente siguen siendo las autonomías, «mejorables». La batería de su coche dura unos 380 kilómetros en viajes por autovía a una media de 120 kilómetros por hora, asegura. Por tanto, hacer trayectos largos supone más tiempo. Eso sí, este taxista ovetense asegura que «el propio coche lo pone muy fácil, porque pones el destino en el navegador y te dice si vas a llegar o dónde tienes que parar a recargar, por lo que te puedes despreocupar», considera.
Y sobre los puntos de recarga, cree que la infraestructura está desarrollada en autovías y carreteras nacionales, pero continúa siendo muy pobre en áreas rurales, donde todavía existe mucho margen de mejora. Además, al igual que su compañero Jaime considera que la clave para sacar el máximo partido a estos coches es poder cargar la batería en casa. «Por ejemplo, en Oviedo no hay cargadores gratuitos. En Mieres sí, pero son muy pocos y muy lentos. Normalmente los que son gratis son muy lentos y los de pago son muy caros. Yo en mi casa cargo a cuatro céntimos el kilovatio hora, mientras que hay cargadores públicos que cuestan hasta 60. Hay mucha diferencia; sigue siendo ahorro con respecto a la gasolina, pero ya es muy poco. Lo interesante es cargar en casa», apoya.
¿Tienes un coche eléctrico? Puedes contarnos tu experiencia a través del correo electrónico redaccion@lavozdeasturias.es