Salvemos La Vega exhibirá músculo con una gran protesta antes de que se firme el convenio
OVIEDO
La plataforma trabaja para sumar nuevos apoyos: «Somos gente de todo el espectro político», aseguran
26 nov 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Oviedo tiene abiertos varios frentes que pueden cambiar el modelo de ciudad de forma radical. Uno de los más importantes, por la envergadura de la operación y por la fuerte contestación que ha provocado el plan previsto, es el de la antigua fábrica de armas. La Plataforma Salvemos La Vega ya reunió a principios de noviembre a más de 2.000 personas en una manifestación y sigue trabajando para conseguir nuevos apoyos. Su objetivo es exhibir músculo en una gran protesta que, aunque no hay fecha cerrada, tienen pensado celebrar antes de que se firme el convenio entre el Ayuntamiento de Oviedo y el Ministerio de Defensa. Mientras tanto, su labor pasa por informar a los ovetenses de la operación y explicarles los puntos más lesivos del acuerdo para la ciudad.
Juan Álvarez, ingeniero de minas y miembro de Salvemos la Vega, reconoce que la última manifestación fue «un éxito», pero deja claro que «no nos conformamos con eso». «Buscamos que el protocolo se detenga y que en enero no se firme el convenio», señala, antes de añadir que «estamos acumulando más fuerzas y tratando de dar más visibilidad a nuestra reivindicación con la intención de sumar apoyos y hacer una gran demostración en la que quede claro que la ciudadanía no está a favor del acuerdo».
Desde la plataforma recuerdan que pasaron de una protesta «potente pero anecdótica en verano, que intentaron ridiculizar, a la suma de apoyos de expertos de la universidad y manifestación masiva». «Intentaron desprestigiarnos diciendo que somos de extrema izquierda, pero hay gente de todo el espectro político. Somos trasversales», reitera Álvarez.
La plataforma considera que el protocolo «consolida un modelo de ciudad que no pone en valor el patrimonio industrial que supone La Vega. Recalifica y permite construir más de 1.000 viviendas y una torre de 25 plantas que desvirtúa la zona porque no tienen sentido competir cuando el valor arquitectónico que es el recinto fabril».
La otra gran queja es que la autopista «rompería la unidad del conjunto al segregar la nave de cañones». «Con el aumento de viviendas en la zona, aumenta el volumen de tráfico y eso es justo lo contrario a dulcificar la entrada por la Y», señalan. «Para mejorar la situación de Santuyano deshaces otro valor patrimonial», añaden.
Puntos positivos del protocolo
El principal punto positivo que se extrae desde la plataforma es que se hayan puesto de acuerdo tres administraciones de distinto signo (Ayuntamiento de Oviedo, Principado y Defensa). «Pero eso no puede hacerse en virtud de desvirtuar lo que se quiere proteger», indica Álvarez. «Que se haga una tasación de la parcela, que es industrial, no urbana, así los beneficios de Defensa se rebajarían a un tercio y los aprovechamientos podrían ser en parcelas diferentes, en otras zonas de la ciudad, sin poner en cuestión el complejo». «Hay que recordar que en Oviedo hay entre 18.000 y 20.000 viviendas sin ocupar», asegura.
Alternativas
Salvemos La Vega tiene claro claro que «no queremos arrogarnos ser la voz de la ciudadana, pero creemos que se debe seguir el procedimiento debido». Álvarez detalla que «deben ser los expertos los que estudien las posibilidades de desarrollo para que se pueda aprovechar el espacio y que las propuestas que surjan tengan el respaldo de esa participación ciudadana y sea refrendado para aunar los intereses de los barrios, la ciudad y Asturias», especifica el miembro de la plataforma. Para conseguir eso, Álvarez incide en que «se deben abrir canales de comunicación, al estilo de lo que se hizo con el Bulevar de Santuyano, pero teniendo claro que los expertos los que deben jugar un papel fundamental».
La plataforma confía en seguir sumando nuevos apoyos y Álvarez apunta que «hay sectores dentro de los que apoyan el protocolo, como el PSOE, donde el candidato local ya está en sintonía con nuestras propuesta, más o menos, y en contra del protocolo. Esperemos que Barbón, que vende que siente el pulso de la ciudadanía y respeta las opiniones, sepa escuchar lo que es un clamor».
La batalla es desigual y el resultado incierto, pero desde Salvemos La Vega defienden que «hay esperanza en que se pueda revertir». «La democracia respeta el sentir de la ciudadanía. Ya que no tenemos ningún otro canal de comunicación, que deberían abrirlo, somos una plataforma que ha conseguido unirse al sentir ciudadano», concluyen.