Aprovechando que la época de mayor consumo de este dulce con siglos de historia es la Cuaresma, recopilamos 10 suculentas recetas de la mano de Platos Ricos
Las torrijas, en su modo clásico o con versiones regionales, las picatostes asturianos o de allende los mares como el «pain perdu» o tostadas francesas, han sido siempre el resultado de un único objetivo: dar salida al pan duro. Remojadas en leche con canela, en vino, fritas con aceite o con mantequilla, siempre tienen como base los mismos ingredientes: huevos, leche y azúcar.
La época de mayor consumo de este dulce con siglos de historia es la Cuaresma, las semanas que van entre Carnaval y Semana Santa. Aunque la razón no está muy clara, se cree que era un pequeño manjar accesible para todos, incluso para los más humildes, en una parte del año donde la religión pedía austeridad en el plato.
Hoy en día ya no necesitas ni que te sobre pan, ya que en casi cualquier panadería o supermercado puedes comprar pan para hacer torrijas. La primera opción siempre será la mejor para evitar el desperdicio alimentario, sobre todo si el pan es el adecuado para torrijas: corteza y miga suave con poca humedad. Dicho esto, cualquier pan es «remojable» en leche, incluido el pan de molde al que todos hemos recurrido para una urgencia de torrijas si no tienes más a mano
Esta selección de torrijas de Platos Ricos incluye opciones veganas y saladas, además de torrijas elaboradas con ingredientes como crème fraîche, nata y sirope de arce y acompañadas de frutas frescas o chocolate.
Si quieres saber cómo se hacen las recetas que te presentamos a continuación, pincha aquí: Recetas de torrijas.
1. Torrijas de plátano y miel

Deliciosas torrijas con plátano especiado y miel para gloriosos desayunos o meriendas de fin de semana. Sirve con nata montada para rematar la faena y así multiplicar por diez el sabor. Usa un pan grueso cortado a mano para esta receta. Si utilizas pan pre-rebanado, remójalo la mitad del tiempo que se indica. Para especiar el plátano, solo tienes que calentar la miel con la canela y el cardamomo y revolver bien hasta que la miel adquiera un color un color dorado oscuro. Después incorpora los plátanos y cubre bien con la mezcla.
2. Torrijas con jerez

El vino de Jerez dulce es perfecto para mojar el pan, una versión que siempre fue más popular que la leche hasta hace unos años. En este caso, todos los ingredientes, incluido el vino (puedes utilizar otro tipo de vino dulce si no tienes un Jerez a mano), van en el mismo cuenco donde vas a dejar remojando el pan para las torrijas. Fríe con aceite de oliva hasta que estén bien doradas y crujientes por los bordes. Sírvelas con miel y yogur o con fruta y helado si quieres que tenga una preentación más para postre.
3. Torrijas con fresa y ricotta

Dales color y sabor a estas torrijas con fresas frescas (o cualquier otro fruto rojo como arándanos o frambuesas), abundante queso ricotta, miel y menta. Puedes jugar con variaciones y sustituir el queso ricotta por requesón o queso cottage, ya que es la mezcla de queso fresco y untable con frutos rojos lo que hace a estas torrijas diferentes. Trozos de melocotón de temporada, bien maduro y, si tienes tiempo pasado por la sartén con un poco de mantequilla, también funcionan muy bien. La pizca de sal marina en el queso potenciará los sabores dulces.
4. Torrijas veganas

¿Quién dijo que los veganos no pueden disfrutar de unas buenas torrijas? Son muy fáciles de hacer y estas, en concreto, se acompañan con compota de sirope de arce y fruta fresca. Añade azúcar glas y la fruta que te apetezca, aunque a las torrijas los frutos rojos son los que más les gusta. También puedes incorporar mantequilla de cacahuete, nata vegana, crema de avellana o chocolate y yogur de coco, las posibilidades son infinitas. Un plato muy resultón para cualquier desayuno, brunch o merienda con amigos, sean veganos o no.
5. Torrijas de brioche con panceta

Sí, hemos ido por lo salado y (alerta spoiler) están deliciosas. Son ideales para ese desayuno tardío de domingo leyendo el periódico, por ejemplo. Esta receta combina panceta salada con pan brioche empapado en una mezcla de nata, huevos y unas gotas de vainilla. Se sirve con un chorrito de sirope de arce y rodajas de plátano. También puedes usar pan especial para torrijas, que hoy en día ya puedes encontrar en casi todas partes. Pon las torrijas ya hechas en el horno para mantenerlas calientes, mientras fríes la panceta bien churruscada en el último minuto.
6. Torrijas de panettone con chocolate y naranja

El panettone ha entrado en nuestros hogares hace unos años y se ha quedado para siempre, y no solo en Navidad. Si te ha sobrado algo de este dulce italiano y no sabes qué hacer con él, esta es tu receta. Las rebanadas se rellenan ligeramente con mermelada y chocolate y se empapan con la clásica mezcla de huevos, leche y, en este caso, también ralladura de naranja. Se sirve con rodajas de naranja previamente pasadas por la sartén con sirope de arce y yogur al lado.
7. Torrijas de chocolate y plátano

Con suave relleno de chocolate (o crema de avellana artesana tipo Asturcilla si lo prefieres) y plátano, previamente machacado y mezclado con un poco de chocolate con leche picado o la crema de avellana. Se monta tipo sándwich, con el relleno entre las rebanadas, para seguir con el mismo método que cualquier torrija: empapar el pan en una mezcla de huevo, nata (en lugar de leche, en este caso), sirope de arce y vainilla (o canela). Una merienda épica.
8. Torrijas en freidora de aire

Si no te apetece usar la sartén, ni con aceite, ni con mantequilla, para eso están las freidoras de aire. El método es el mismo, el brioche o pan especial para torrijas, se empapa en un huevo, nata y canela para pasarlo a la freidora previamente precalentada hasta que las rebanadas estén crujientes y doradas. Espolvorea con azúcar glas y sirve con frutos rojos o bacon si prefieres algo salado.
9. Torrijas con mermelada

En realidad, es un sándwich de torrijas que se elabora con huevos, crème fraîche (o crema agria o yogur griego) azúcar, y está relleno de mermelada. Es muy fácil de hacer y puedes elegir la mermelada que más te guste y, si te gusta mucho lo dulce, espolvorea con azúcar glas una vez fritas y añade miel o sirope de arce. Una receta deliciosa con un toque cítrico gracias a la ralladura y zumo de naranja en el líquido para empapar el pan.
10. Torrijas veganas con leche de coco

Una segunda versión vegana de torrija, deliciosas tanto para veganos como para el resto de los mortales. Para deshacer bien la leche vegetal (la que te apetezca) es mejor mezclar al principio un chorrito con una cucharada de harina de maíz o garbanzo, revolver bien hasta que no haya grumos y luego añadir el resto de la leche. De esta manera se espesará bien para que el pan no pierda la forma. Fríe en aceite vegetal o cualquier aceite que no sea fuerte. Sírvelas con yogur de coco y frutos rojos o los acompañamientos que te apetezcan.