Los azules ganan por la mínima y en la recta final al Cartagena (1-0) gracias a un gol del argentino en un partido que controlaron pero que les costó desnivelar
16 sep 2024 . Actualizado a las 09:52 h.Sí, al Real Oviedo todavía le faltan muchas cosas y esta tarde contra el Cartagena se pudieron ver varias de dichas cosas. Lo que no hay que negar es que los azules hicieron muchísimos más meritos que su rival para sumar los tres puntos. En un día complicado, con el fantasma de la derrota en el derbi asturiano y el baño de realidad del Racing de hace dos semanas pululando en el ambiente, los azules merecieron ganar y lo hicieron (1-0). Cuánto quería este gol Santiago Colombatto, por cierto.
Oviedo controlador y sin pegada
Tal y como se esperaba, Javi Calleja movió el árbol buscando la reacción. Lemos por Lucas, Luengo por Costas, Sibo por Del Moral y Hassan por Sebas Moyano. El Real Oviedo pisó el césped del Tartiere con la intención de controlar el partido desde el primer minuto y así lo hizo. Solo las posibles pérdidas en zonas peliagudas podían alterar el guion del encuentro y darle una opción al Cartagena. Por lo demás, los azules jugaban en campo rival y era el penúltimo pase, ese que muchas veces es más importante que el último, el que no aparecía. Ilyas Chaira era el único que picoteaba entre líneas y de una de las suyas surgió una falta desde más allá de la frontal que Santi Cazorla lanzó rasa y besando el poste.
El equipo de Javi Calleja tenía el balón, sufría cuando el Cartagena estaba bien asentado por dentro y sonreía cuando aparecía la diagonal. Ese pase que podían dar Calvo, Luengo y, sobre todo, Santi Cazorla, era el único que ponía en aprietos al Cartagena de Abelardo. Se acercaba la media hora de partido y Alemao solo había tocado el balón tres veces, así que el Cartagena, aunque no pisaba el área del Oviedo, estaba más o menos satisfecho. En el 29’, Colombatto puso una falta lateral desde la derecha y el cabezazo de Luengo lo desvió Pablo Campos. En el rechace, Luengo de nuevo, disparó alto. El Oviedo apretaba y Hassan aparecía en derecha. El francés se iba y empezaba a coger ritmo de regate, pero el centro siempre era malo.
En la recta final, poco o nada sucedió. Un par de despistes de Dani Calvo en salida de balón pusieron nerviosa a la grada del Tartiere, que pidió que se parase el partido por un incidente en los palcos de la Tribuna Lángara. El colegiado, guiándose por el nuevo protocolo por el cual solo la Policía puede parar un partido, mandó seguir. Mientras que el Cartagena pedía penalti de Escandell sobre Gastón Vallés, el Oviedo seguía con sus problemas con balón. La primera línea -centrales y Sibo- o las alturas que ocupaban los jugadores interiores, pero algo fallaba. Descanso y 0-0.
Y el premio llegó en la recta final
Sin cambios tras el paso por vestuarios, Santi Cazorla fue el primero en probar suerte desde la frontal con un tiro desviado. El Real Oviedo, con un empuje más pasional que futbolístico, ganaba metros y amenazaba a través de centros laterales y saques de esquina sin que ninguno se convirtiera en ocasión clara. Sibo en uno de esos lanzamientos desde la esquina lo intentó, pero el remate se fue desviado. Después de que Alemao molestase a Cazorla en un pase atrás de Hassan, Dani Calvo vio la amarilla al derribar a Sergio Guerrero tras un mal control en salida de balón. No estaba siendo el día del central azul.
Momento de hacer cambios: Alemao y Hassan fuera, Paraschiv y Sebas Moyano dentro. Justo antes, Colombatto encontró a Chaira y el disparo del marroquí lo blocó Pablo Campos. Siete minutos después, segunda ventana de cambios oviedista: Paulino y Seoane dentro, Chaira y Sibo fuera. El Oviedo ya iba con todo y se quedaban calentando Dotor, Masca, Lucas y Costas. Último cuarto de hora del partido y un centro desde la izquierda que peinó Paraschiv y al que no pudo llegar Paulino era lo único que el Tartiere podía gritar. Los nervios ya sobrevolaban el estadio ovetense, aunque los azules lo seguían intentando. Paulino el primero, por cierto. Y el premio llegó.
Una jugada larga del Oviedo se fue cocinando a fuego lento más allá del balcón del área del Cartagena. De izquierda a derecha, de derecha a izquierda. Paulino recibió en derecha, se fue al interior y su disparo le cayó a Sebas Moyano. De un mal control, el extremo supo sacar un centro desde línea de fondo que Colombatto solo tuvo que empujar con su zurda. 1-0 y rabia al exterior del centrocampista argentino, que quería este gol más que nadie. Quedaban menos de diez minutos para el final y Dotor por Cazorla era el último cambio de Calleja. De una forma muy tímida el Cartagena intentó apretar, pero Escandell no tuvo trabajo. Después de un cabezazo de Escriche que era más claro de lo que él mismo pensaba, el Oviedo, el oviedismo y Javi Calleja podían respirar tranquilos.
Ficha técnica
Real Oviedo: Aarón Escandell; Lemos, Luengo, Dani Calvo, Rahim; Sibo (Seoane, min 73), Colombatto, Cazorla (Dotor, min 88); Hassan (Sebas Moyano, min 65), Ilyas Chaira (Paulino, min 73), Alemao (Paraschiv, min 65).
FC Cartagena: Cartagena: Pablo Campos; Aguirregabiria, Jorge Moreno, Sipcic, Vuckevic; Musto, Sergio Guerrero (Escriche, min 85), Luis Muñoz (Andy, min 73); Jairo Izquierdo (Pocho Román, min 80), Cedric Teguia (Hugo González, min 85) y Gastón Valles (Ortuño, min 80).
Goles: 1-0 Colombatto (min 82)
Árbitro: Ávalos Barrera (Comité catalán). Amonestó a los locales Dani Calvo (57'), Lemos (69'), Ilyas Chaira (70') y a los visitantes Vuckevic (28’), Pablo Campos (66'), Musto (75')
Incidencias: Estadio Carlos Tartiere (Oviedo). 19.492 espectadores. El medallista olímpico ovetense Alberto Suárez Laso realizó el saque de honor.