Pomares: «Solo cruzar la línea del campo hizo que volviese a sentirme futbolista»
AZUL CARBAYÓN
«Intento estar tranquilo con el trabajo que hago para no volverme loco, porque este año me hubiese vuelto loco», dice el jugador del Real Oviedo tras una temporada muy difícil por las lesiones
19 abr 2023 . Actualizado a las 20:53 h.Minutos antes de que empezase el entrenamiento del Real Oviedo, el primero de los azules tras el triunfo del sábado ante el Lugo, Carlos Pomares analizó la actualidad azul en la sala de prensa de El Requexón. El lateral izquierdo oviedista, uno de los jugadores -si no el que más- más castigados por las lesiones este curso, compareció por primera vez ante la prensa y habló de su regreso a la competición casi dos meses después, de la temporada en general y del momento del equipo.
Su regreso tras dos meses lesionado
«La verdad es que he perdido la cuenta, no sé si fueron tres meses sin jugar o más. Para mí, el cruzar la línea de la banda, más que por los minutos que jugase, hizo que me volviese a sentirme futbolista. Siempre es bonito volver, ya ni miré las sensaciones físicas».
¿Cómo gestionar una temporada tan complicada?
«Cada uno tiene su manera de afrontarlo. Yo tengo claro que el único método es trabajar, es lo único que se puede hacer y lo único que me da garantías a la hora de irme a mi casa tranquilo. Lo hice así desde que empecé con 16 años. Tengo 30 y, salvo este año, me ha ido bien. Lo seguiré haciendo así. Sé que el gimnasio es bueno, que el trabajo de fuerza es bueno, aunque algunos amigos me digan que igual es demasiado, lo seguiré haciendo. Mi manera de proceder, mi medicina, es ese trabajo. Intento estar tranquilo con el trabajo que hago para no volverme loco, porque este año me hubiese vuelto loco».
«Jugar queremos jugar todos, especialmente tras un año así, pero lo que quiero es volver a sentirme futbolista, tener buenas sensaciones. Incluso entrenando. Justo cuando me volví a lesionar por ultima vez estaba teniendo esas sensaciones. Busco eso. A pesar de que queden partidos importantes y sea el tramo más complicado del curso, para mí esta recta final ya tiene un sentido más personal».
¿Qué ha pasado? Lo personal y el equipo
«Soy bastante pesado con todo esto de la preparación física y siempre busco el porqué de las cosas. No sé si es virtud o defecto. Estoy bien asesorado por gente que sabe y ninguno sabemos el motivo. Ninguna lesión ha sido recaída, todas han sido diferentes. No hay explicación, y he buscado desequilibrios en todos los aspectos. No hay nada que nos indique un motivo claro, los datos míos entrenando eran como los del resto… todo se ha dado normal. Y yo estoy feliz en Oviedo. El mecanismo de las lesiones es multifactorial, y lo hemos intentado todo. Ahora estamos trabajando fuerza muchísimo».
«He tenido de todo en mi carrera. Este año hemos tenido muchas lesiones, es innegable, pero he hablado con mucha gente y el trabajo que se hace no es malo. Soy un 'friki' de la preparación física y el trabajo que se hace, y el que se hizo, no es malo. Las cosas vienen como vienen y nos ha tocado, lo hemos ido capeando como hemos podido y eso también tiene un mérito bastante importante. Cuando todo va bien todo el mundo sabe cómo actuar, pero cuando va mal es cuando hay que sacar el libro».
La aparición de Abel Bretones
«Se ha encontrado con una situación anómala y la ha aprovechado, estoy contento por él y me alegro. Está aportando mucho al equipo».
El momento del equipo y el balance de la temporada
«La lástima es que estas dos victorias no hayan llegado antes, muchas veces el estar 14º o 8º es cuestión de moral y de sentirte bien dentro del campo. Si no cosechas varios resultados positivos seguidos te hace salir al campo más temeroso y condicionado. Es una pena que no lo hayamos conseguido antes».
«La temporada ha estado marcada por los resultados, lo empañan y condicionan todo. Se hizo un buen trabajo al principio, con el cambio de míster y ahora. Empezamos más o menos bien, luego se empañó y con el cambio de míster cogimos una época buena hasta que se volvió a empañar. También las bajas han marcado mucho, con gente que se ha cargado demasiado de minutos. Ha sido una temporada atropellada, en todos los aspectos».
«Lo decepcionante viene cuando tienes expectativas demasiadas altas. En Segunda División tengo claro que es muy difícil aspirar a lo más alto desde el primer día. Hay muchos equipos con mucho dinero y es complicado. Cuando empieza la temporada hay 22 equipos que quieren estar arriba. Para mí lo decepcionante ha sido que tuvimos muchas lesiones y que no pudimos tener fondo de armario, algo que hace falta en una temporada tan complicada. Todos queremos estar arriba, pero las temporadas y los rendimientos van como van, esto no es 2+2=4. No es así».
«Hay que marcar una manera de trabajo en el club y seguirla, eso es lo que te va a dar pie a estar más arriba en años venideros. Tener una forma de trabajar y seguirla todos, esa es la clave. Clubes como Eibar o Leganés, con una forma de trabajar, prosperan. Y otros clubes mucho más grandes, pero sin esa metodología, que caen. Así crecen los clubes. Me apoyo sobre el trabajo, y más después de esta temporada con las lesiones».
«Creo que la gente que ha entrado en el Oviedo viene a sumar, vienen a establecer una manera de trabajo. Por eso me da cierta pena que no se hayan conseguido mejores resultados. Por lo que veo, por cómo observan ellos, creo que vienen a sumar al club».
El partido del sábado en Ibiza
«Ahora todo el mundo se juega algo, y más los que están en descenso. Yo estuve en esa situación y aprietas, y sobre todo en casa. Jugar en Segunda es muy bonito y para un club supone mucho a nivel de todo, todo el mundo quiere estar. Será un partido complicado, lo que buscas es ganar cueste lo que cueste, es lo único que importa».