Los azules, a ocho del playoff tras la victoria del Girona, quieren sumar tres puntos dos jornadas después ante un Valladolid lanzado a por el ascenso directo
13 mar 2022 . Actualizado a las 10:55 h.La Segunda División es una competición tan igualada que dos victorias consecutivas pueden cambiar el transcurso de la categoría. Pero hay que conseguir esas victorias, claro. Esta tarde, el Real Oviedo recibe a todo un Real Valladolid (Carlos Tartiere, 18:15 horas) con la necesidad de sumar tres puntos para sobreponerse a las últimas dos derrotas seguidas. Cuando Iglesias Villanueva señale el inicio del duelo, los azules estarán a ocho puntos del playoff y habrá cinco equipos entre ellos y el codiciado sexto puesto. Por primera vez en mucho tiempo, ganar es casi una obligación si se quiere seguir aspirando hasta el final. Toca regresar al vagón de los aspirantes.
Las dudas de Ziganda
Hace semanas, las dudas que podía tener el oviedismo horas antes de que arrancaran los encuentros del Real Oviedo estaban centradas en uno o dos jugadores, nada más. Tras los últimos encuentros, el esquema utilizado por José Ángel Ziganda es el gran misterio de la previa. Tres centrales y carrileros, 4-4-2 o 4-3-3: esas parecen ser las opciones. La primera, la que juntaría a Calvo y Costas con Luismi o Tarín, podría beneficiar a un Joni Montiel que asomó la cabeza en Girona. El madrileño, tirado a la derecha y con la protección necesaria por detrás, podría regresar a la titularidad más de seis meses después, acompañando en el ataque a Borja Bastón y Borja Sánchez.
Esa sería la opción más rompedora, porque si el Cuco apuesta por el 4-4-2 no habría muchas más dudas salvo la del acompañante de Bastón —también podría ser Montiel— o la de quién se quedaría en el banquillo entre Luismi, Brugman y Jimmy. En los sistemas de cuatro defensas, Viti podría tener un sitio asegurado en el flanco derecho. Sí parece claro que Borja Sánchez será de la partida y que Pierre Cornud y Carlos Isaac, ausentes la semana pasada en Montilivi, ocuparán los carriles.
Un rival que genera pánico
11 jornadas consecutivas sin conocer la derrota, con 8 victorias y 3 empates en su casillero. Desde que el Valladolid venciese por la mínima al Oviedo a mediados de diciembre, el pucelano es el equipo más en forma de la Segunda División. Tanto es así, que los de Pacheta ya dieron caza hace semanas a Eibar y Almería y esta misma tarde, en el Tartiere, podrían acabar el partido en posiciones de ascenso directo. El estado de euforia es una realidad en club blanquivioleta. Tanto, que más de 2.000 aficionados visitantes estarán presentes en las gradas del Tartiere.
El extécnico carbayón ha dado con la tecla y, a partir de un 4-4-2, los vallisoletanos son el equipo de la Liga con más recursos a la hora de tener el balón en campo rival y también el que más ocasiones genera. También te pueden matar con espacios, como hicieron hace una semana ante un Tenerife que también luchaba por los mismos objetivos y que cayó 1-4 sin apenas darse cuenta. Para el duelo de esta tarde, Pacheta recupera a Roque Mesa —faro del centro del campo—, al lateral Nacho y al pichichi Weissman, aunque la titularidad de este último no está asegurada. Si el israelí no llega, será Cristo González la pareja de un enchufado Sergio León.
Posibles alineaciones
Real Oviedo: Femenías; Carlos Isaac, Costas, Dani Calvo, Tarin, Cornud; Luismi, Brugman; Joni Montiel, Borja Bastón y Borja Sánchez.
Real Valladolid: Masip; Luis Pérez, El Yamiq, Javi Sánchez, Nacho; Óscar Plano, Aguado, Roque Mesa, Toni Villa; Sergio León y Weissman.
Árbitro: Iglesias Villanueva, del comité cántabro.
