El Real Oviedo se hunde en Cartagena

ALFONSO SUÁREZ OVIEDO

AZUL CARBAYÓN

gol Femenias Cartagena Real Oviedo Cartagonova.Joan Femenías se lamenta tras el 2-0 del Cartagena
Joan Femenías se lamenta tras el 2-0 del Cartagena LaLiga

Dos fallos groseros en defensa condenan a los azules a la derrota y a verse nuevamente en la zona baja de la clasificación

06 feb 2021 . Actualizado a las 18:00 h.

La peor de las pesadillas empieza a escribirse. El buen momento del Real Oviedo en el final de 2020 o en los dos primeros partidos del año nuevo se ha esfumado. Los de José Ángel Ziganda cayeron con merecimiento ante el Cartagena (2-0) en un choque que era casi obligatorio ganar para alejar los fantasmas del descenso.

La derrota no llega por el buen juego local, sino por los groseros fallos visitantes, que es peor. Joan Femenías acaparó su cuota negativa de protagonismo, con responsabilidad directa en los dos tantos albinegros. El cancerbero falló, pero no fue el único.

Los del Principado se hunden en la clasificación y empiezan a quemarse en la tabla. Ahora, ya no hay mercado de fichajes al que acudir ni al que agarrarse. Esa oportunidad se dejó pasar de largo, como el que pierde las noches eligiendo qué ver en Netflix sin llegar a ver nada. Lo que queda por delante son meses de sufrimiento para volver a salir de la zona baja. En cuanto se habló de playoff, regresó la amenaza del descenso.

Fallo tras fallo a balón parado

La alineación del Real Oviedo no deparó sorpresas, pero sí cambios. Regresaron Lucas Ahijado, Edgar González y Borja Sánchez por Mossa, Javi Mier y Rodri Ríos. Regreso a un 4-2-3-1 que siempre ofreció mejores sensaciones que el dibujo con dos puntas. Nahuel Leiva regresaba al centro para acompañar a Blanco Leschuk.

Cuco Ziganda y su cuerpo técnico tienen un problema. Por ahora, han sido incapaces de frenar la sangría en el balón parado defensivo. Cada jornada es un nuevo drama. No ya de goles, que también, sino de jugadas que terminan con remate rival. Avisó Rubén Castro instantes antes del 1-0. Poco después, la defensa fue incapaz de despejar de forma contundente otras dos acciones similares que precedieron al saque de esquina del tanto local.

De nada sirvió el buen planteamiento azul durante la primera media hora, ni el hecho de gozar de un par de buenas llegadas o que Gustavo Blanco Leschuk fallara una gran ocasión ante Leandro Chichizola cuando tenía a Nahuel completamente solo a su lado. Todo saltó por los aires, una vez más, a balón parado.

Hace unas semanas, en el último partido de 2020, Yuri de Souza daba los tres puntos a la Deportiva Ponferradina tras un remate en el segundo palo con fallo de Juanjo Nieto. Hoy, le tocó el turno a Lucas Ahijado cometer el error que abría la puerta al 1-0 de Rubén Castro. El tanto, casi idéntico al recibido en El Toralín: remate en el segundo palo en un saque de esquina con pasividad defensiva y nula salida del portero en un balón aéreo favorable.

Un VAR inentendible

Si los del Principado se meten en problemas serios es exclusivamente por sus fallos. Nada de echar balones fuera. Otra cosa es que la aplicación del VAR (y no la herramienta en sí) sea desquiciante. ¿Cuándo se revisa y cuándo no? ¿Cuándo prevalece la interpretación del colegiado y cuándo no? Al Real Oviedo le está saliendo cruz en casi todas las jugadas dudosas.

En el tramo final de la primera parte, con el 1-0 en el marcador, Sangalli cayó en el área tras un contacto con Adalberto Carrasquilla. Pulido Santana decretó la pena máxima, pero Vicandi Garrido, desde la sala VOR, le envió a la pantalla para revisar la acción. Las repeticiones que vio el colegiado canario (no todas las existentes ni siquiera las más cercanas a la acción) le hicieron rectificar su decisión. Pese al contacto evidente y pese a la interpretación del colegiado, esta vez el VAR sí que corrigió al colegiado sobre el terreno de juego.

De circo

La segunda parte fue una oda a la impotencia ofensiva, un calco del partido ante el Albacete tras el gol de Zozulia. Un quiero y no puedo. O un quiero y no me sale. O un quiero y no sé. Como se prefiera. Sin ocasiones, sin llegadas, sin centros al área competentes… Lo que sí sumó el Real Oviedo es un buen puñado de fallos que sentenciaron el partido.

Primero, Christian Fernández se hizo un lío con el balón siendo el último futbolista. Pablo De Blasis perdonaba el 2-0 en el mano a mano. Acto seguido, un centro sin peligro alguno, blando e inocente era rechazado por Femenías, quedando franco para que Berto Cayarga, tras otro fallo en el tiro de De Blasis, anotara el segundo tanto de la tarde.

Ni Borja Valle ni ningún cambio (entraron Javi Mier, Rodri Ríos y Mossa) pudieron cambiar absolutamente nada. El Real Oviedo se ha metido en problemas, se ha hundido en un eterno debate entre puntos y sensaciones. Lo único cierto es que, discursos optimistas aparte, son los futbolistas los que deben revertir la situación.

Cinco puntos sobre el descenso que pueden ser menos al final del fin de semana. La próxima jornada, los del Principado reciben al Lugo en el Carlos Tartiere. Un partido que, en el mes de febrero, adquiere tintes dramáticos para los de Ziganda. La sombra del descenso es alargada y ya alcanza a José Ángel Ziganda, indiscutible hace apenas un par de semanas. 

Ficha técnica

FC Cartagena: Chichizola; Antoñito (Delmas, min 76), Raúl Navas, Datkovic, De la Bella; Álex Gallar (Berto Cayarga, min 55), Carrasquilla, Aburjania, De Blasis (Nacho Gil, min 76); Elady Zorrilla (Azeez, min 67), Rubén Castro (Cristian López, min 67).

Real Oviedo: Femenías; Nieto, Grippo, Christian Fernández, Lucas Ahijado (Mossa, min 73); Edgar González (Javi Mier, min 60), Tejera (Obeng, min 85); Sangalli, Nahuel Leiva (Rodri Ríos, min 73), Borja Sánchez (Borja Valle, min 60); Blanco Leschuk.

Goles: 1-0 Rubén Castro (min 33). 2-0 Berto Cayarga (min 71).

Tarjetas: El colegiado Pulido Santana amonestó a los locales De la Bella (min 51), Datkovic (min 89) y Cristian López (min 90+6), y a los visitantes Edgar González (min 24) y Sangalli (min 45+3).

Incidencias: Estadio de Cartagonova.