Cuando menos es más

ALFONSO SUÁREZ OVIEDO

AZUL CARBAYÓN

Borja Sánchez, Marco Sangalli y Alfredo Ortuño celebran el 0-1 ante el Alcorcón
Borja Sánchez, Marco Sangalli y Alfredo Ortuño celebran el 0-1 ante el Alcorcón Real Oviedo

El Real Oviedo ha basado sus dos victorias consecutivas en un altísimo porcentaje de efectividad de cara a portería

08 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Los números son claros. Pese a la clasificación, solo Almería, Rayo Vallecano y Cádiz son más goleadores que el Real Oviedo. De estos tres, gaditanos y almerienses ocupan puestos de ascenso directo. Al conjunto de la capital del Principado le está condenando no poner un candado en su portería. 

En la otra cara de la moneda, en la positiva, nos encontramos con un equipo al que le está costando muy poco trabajo hacer gol. De hecho, en sus tres últimas victorias (Alcorcón, Rayo Vallecano y Girona), su porcentaje de efectividad de cara a portería rozó la perfección. Casi nada. Con un conjunto que golea con muy pocos disparos, Javi Rozada tendrá más tiempo para crear un entramado defensivo acorde a la categoría. 

El Alcorcón, a la lona

La pegada del Real Oviedo en Santo Domingo está fuera de toda duda. Solo en el primer tiempo, los azules anotaron dos goles con dos disparos entre los tres palos. Un 100% de efectividad para los carbayones, que prácticamente sentenciaron el choque en cuatro minutos. Simplemente increíble. 

En la segunda parte fueron tres los disparos entre los tres palos, con un gol. En total, tres tantos con solo cinco disparos. Sumando los que se fueron desviados, un total de ocho. El Alcorcón, por ejemplo, disparó en hasta 11 ocasiones. 

Casi pleno ante el Rayo Vallecano

Si ante el Alcorcón la efectividad fue un arma imparable para los azules, ante el Rayo se dio la misma medicina. El Real Oviedo venció en los minutos finales a los de Paco Jémez tras un penalti cometido sobre Juanjo Nieto y transformado por Alfredo Ortuño. 

Aquel día, los de Javi Rozada necesitaron únicamente tres disparos entre los tres palos para anotar dos goles. El otro tiro, el que no terminó en gol, fue la increíble ocasión de Sangalli con el 1-0 que se topó con una gran intervención de Stole Dimitrievski.

Ante el Girona, la perfección

Se da la circunstancia que la última victoria antes de esta mini racha de resultados fue ante el Girona. Aquel 20 de octubre, en el Carlos Tartiere, el Real Oviedo venció a los catalanes por 4-2 gracias a los tantos de Ortuño (por partida doble), Borja Sánchez y Yoel Bárcenas. En total, los azules disparon cuatro veces entre los tres palos. Juan Carlos, cancerbero del conjunto catalán, no realizó ninguna parada