El Real Oviedo ganó al Vetusta con un solitario gol de cabeza del central tras un córner botado por el '10' azul
18 jul 2018 . Actualizado a las 23:24 h.Primer partido de pretemporada para el Real Oviedo y primera oportunidad para ver reflejado en el campo lo entrenado esta semana y media por Juan Antonio Anquela. La afición carbayona demostró las ganas de fútbol que hay en la capital del Prinicipado y El Requexón se colapsó debido a la gran asistencia.
Ante un Vetusta con prácticamente los mismos entrenamientos pero menos carga física, el partido siguió los derroteros del típico test primerizo de pretemporada. Mucha posesión de balón, ritmo bajo y poco desequilibrio. Como se preveía, el 1-4-3-3 fue el esquema elegido por Anquela para la primera parte, mientras que en la segunda, tras cambiar a los once protagonistas en el descanso, optó por un rombo en la medular.
Cortina, Muñoz y Berjón, protagonistas del primer tiempo
Alfonso; Carlos Martínez, Carlos Hernández, Josín, Mossa; Cortina, Javi Muñoz, Boateng; Aarón, Steven y Saúl Berjón. Esta fue la primera alineación del Oviedo 18/19. A los 25' Lucas sustituyó a Carlos, cambio pactado con el cuerpo técnico desde el principio del encuentro.
Cortina se erigió como protagonista en el inicio de juego del primer equipo y dejó grandes detalles ejerciendo de brújula en el esquema de Anquela. El capitan del Vetusta la pasada temporada encontró en Javi Muñoz a su mejor socio. El madrileño exhibió controles y se encontró muy cómodo en la medular azul.
Sufrió más Boateng, al que le costó ser parte activa de la circulación de balón y no se vio beneficiado al recibir de espaldas y con poco espacio por delante. El partido cambiaba, como casi siempre, cuando recibía Saúl Berjón. Ya no solo por la asistencia en el gol de Carlos, que remató en el primer palo un gran centro del nuevo '10' azul, si no porque cada vez que tocaba el balón los huecos aparecían en tres cuartos de campo.
Como esos niños que se reencuentran en el recreo el primer día de colegio, Berjón, Aarón y Mossa combinaron en el perfil izquierdo y a raíz de dicha asociación llegaron las mejores jugadas azules, de las que no se pudo aprovechar un Steven peleón pero sin suerte en el área.
Rombo en la medular, menos ritmo y un gran Tejera
Los cambios llegaron y el once de Anquela cambió por completo: Champagne; Diegui, Forlín, Christian, Lobato; Folch, Tejera, Borja Sánchez, Asier; Ernesto y Toché. El primer contratiempo llegó pronto y Christian tuvo que irse a los vestuarios a los cinco minutos, puesto que ocupó Josín.
Folch fue el pivote del rombo, con Tejera y Borja de interiores por delante y Asier de mediapunta, detrás de Toché y un Ernesto que se movía con mucha libertad por el frente de ataque. Las ocasiones brillaron por su ausencia y al Oviedo le costó llegar más al área del Vetusta.
Tejera lideró el centro del campo y mostró su brillante zurda a los aficionados de El Requexón, al lado de un Borja que fue su mejor socio. El ex del Real Madrid tiró de repertorio en los controles y enlazaba bien con sus compañeros, pero sin llegar a causar peligro a un ordenado Vetusta.
Con el paso de los minutos el equipo de Rozada se iba abriendo y los huecos aparecían, momento en el que la pizarra de Anquela cobraba peso. Tejera y Borja daban el apoyo en las bandas y los dos laterales se mostraban en profundidad. Así llegaron varios centros laterales que Ugarte y Alex, centrales del filial, pudieron desbaratar.
El partido se fue muriendo con varias acciones a balón que parado que sirvieron de nuevo para que Tejera luciera zurda y para que Lucas Díaz, uno de los fichajes del filial, mostrará fundamentos en el juego aéreo y sacando los puños.
El marcador no se movió y el gol de Carlos decidió el encuentro. El Real Oviedo volverá mañana a los entrenamientos a las 10:00 horas, siendo esa la única sesión del día. El próximo amistoso, el sábado ante el San Sebastián de los Reyes en un campo aún por determinar.