La «triste oportunidad» industrial de Asturias: empleo de calidad y potencial económico en un sector bajo la lupa ética

ASTURIAS

Empresarios y sindicatos valoran el impacto en la región de la inversiones anunciadas en Defensa: «Estamos mucho mejor preparados que en otros territorios para aprovechar el tirón»
17 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.El nuevo impulso europeo al sector de Defensa, motivado por el escenario geopolítico internacional y los compromisos de inversión militar en el marco de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), abre una ventana de oportunidades para territorios con tradición industrial como es el caso de Asturias. La región, con empresas ya implantadas en el ámbito armamentístico y una base laboral cualificada, se prepara para captar parte de esas inversiones estratégicas. Empresarios y sindicatos valoran con distintos matices el potencial de este desarrollo, que podría consolidarse como un nuevo motor económico para la comunidad.
Pablo Junceda, director general de Sabadell Herrero y Sabadell Popular, lo tiene claro: «En Asturias siempre estamos diciendo que hay que apostar por el mundo industrial. En estos momentos la geopolítica nos va a permitir que una industria como es la Defensa, que va a crecer exponencialmente durante estos años, se instale en Asturias». Junceda subraya que el contexto es favorable: «Estamos mucho mejor preparados que en otros territorios para aprovechar el tirón de esta actividad industrial. El futuro es la industria de Defensa». Por su parte, Javier Sáenz de Jubera, presidente de TotalEnergies Electricidad y Gas, destaca el efecto positivo en el empleo y la calidad laboral: «Las inversiones en Defensa van a impactar positivamente. Lo bueno de este tipo de actividades es que tienen mucho empleo indirecto y exigen empleados con especialización técnica. Los salarios normalmente son bastante más elevados que en el sector servicios».

Juan Rodríguez Coloma, consejero delegado de Industrias Lácteas Asturianas (ILAS), no entra en valoraciones políticas, pero ve la oportunidad: «Si se ha decidido que se tiene que prestar más atención al sector armamentístico por la situación actual del mundo y eso puede tener implicaciones para Asturias, está bien. Todo lo que sean inversiones para la comunidad está bien». Por otro lado, Félix Baragaño, presidente de la Cámara de Comercio de Gijón, recuerda que «en Asturias ya tenemos la industria de la Defensa desde hace muchos años». Asume la complejidad del contexto, pero cree que el potencial es evidente: «Que Asturias esté ya con esta industria desarrollada es un comienzo extraordinario para tener un desarrollo mucho más amplio. Lo veo como un sector complementario que ayudará a dinamizar la economía y generar empleo de alta cualificación». En este sentido, María Calvo, presidenta de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), considera que el sector Defensa puede convertirse en uno de los pilares industriales de los próximos años: «Puede ser una pata muy importante que generará inversiones y empleo en un sector estratégico para Asturias, España y Europa». Eso sí, advierte: «No puede ir en detrimento de otras ramas industriales. Debe venir para sumar».
Postura de los sindicatos: «Es una triste oportunidad»
Desde el ámbito sindical, Javier Fernández Lanero, secretario general de UGT Asturias, reivindica el potencial logístico y laboral del Principado: «Asturias puede ser ese polo logístico en materia de Defensa en el norte de España. Tiene algo que escasea mucho en otros lados, que es el talento y el conocimiento». Reclama claridad estratégica a las empresas del sector: «Queremos saber cuál es la estrategia que va a seguir General Dynamics para no solo garantizar la carga de trabajo, sino generar más empleo».

Por su parte, José Manuel Zapico, secretario general de CCOO Asturias, aporta un enfoque crítico, pero realista: «Nosotros hablamos de triste oportunidad. Europa tiene que ser un espacio de seguridad y de paz y, desgraciadamente, eso pasa por fortalecer el sector de Defensa». Aun así, subraya los beneficios sociales: «Es un sector que genera mucha investigación y desarrollo, y aquellas sociedades que generan conocimiento son las que tienen más resiliencia ante las dificultades». Para Zapico, el sindicalismo en este sector juega un papel clave: «Donde hay sindicato y organización de los trabajadores hay mejores condiciones laborales».