Ejecutar todas las partidas presupuestarias para las ayudas al alquiler, reparar el parque actual de vivienda pública o actuar como garante en los alquileres de larga duración son algunas de las medidas de la Consejería de Vivivienda que ya se han puesto en marcha o están a punto
18 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El anteproyecto de la nueva Ley de Ordenación Integral del Territorio de Asturias (LOITA), que sustituirá a la normativa vigente desde 2004, se presentará a finales de año y la tramitación de la Ley de Vivienda comenzará antes de 2026. Así lo indicaba este lunes el consejero de Ordenación de Territorio, Urbanismo, Vivienda y Derechos Ciudadanos, Ovidio Zapico, que compareció en la Junta del Principado para contestar preguntas centradas en las ayudas al alquiler a las que este año se han destinado y prácticamente agotado más de 11 millones de euros.
Cumplir en tiempo y forma con la ejecución de estas partidas destinadas a las ayudas al alquiler es una muestra, según Zapico, de que «comienza a ser una realidad» el cambio de «180 grados» en las políticas de vivienda al que se comprometió al inicio de la legislatura. Mientras tanto, el mercado inmobiliario en Asturias, fundamentalmente el alquiler de viviendas, sigue sometido a una subida especulativa de los precios que parece no tener techo. Precisamente esta semana Sumar proponía a nivel estatal, dentro de la negociación presupuestaria, que en las zonas tensionadas solo se permita adquirir una vivienda si es para vivir en ella o para alquilarla a un precio relativamente asequible.
En todo caso, la decisión sobre qué hacer en las zonas tensionadas, que son aquellas en las que el incremento de los precios de alquiler no ha parado de incrementarse como por ejemplo el centro de Gijón, dependerá de las comunidades autónomas. En Asturias, el consejero de Vivienda recordaba este lunes que de forma inminente se quiere impulsar la movilización del parque privado de vivienda a precios asequibles mediante la actuación del Gobierno asturiano como garante para que los propietarios tengan asegurado el cobro de las mensualidades y reciban el inmueble en perfecto estado.
Esta iniciativa, que se había puesto en marcha hace ya años en Gijón a través de la Empresa Municipal de Vivienda a iniciativa precisamente de IU, garantizaría el pago de las cuotas de alquiler durante los seis años en los que sería efectivo el contrato. A ello se suman, como también decía Ovidio Zapico en su comparecencía en la Junta, la construcción de nuevas promociones de vivienda pública con alquileres asequibles.
A finales de este año deberían comenzar las obras de 600 nuevas viviendas que ya han sido licitadas y que se sumarían, una vez construidas, a los 1.822 inmuebles públicos rehabilitados y ocupados este año. También se han recuperado 233 pisos de los 313 que estaban sin uso y pendientes de reformar, estando 74 en reparación o a punto de serlo y 176 ya adjudicados a familias.
De todas formas, en Asturias hay al menos más de 100.000 viviendas vacías y, en ese sentido, otra de las iniciativas del Gobierno autonómico pasa por adquirir vivienda de segunda mano para su posterior rehabilitación. Mientras se llevan a cabo estos planes o se van despejando las claves de las medidas que se adoptarán finalmente en España para darle sentido al artículo 47 de la Constitución Española —«Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada»—, la realidad del mercado inmobiliario en Asturias se percibe a través de los diversos estudios que se vienen realizando y que constatan que, aunque la situación no llega a los extremos de otras comunidades, también se está complicando bastante.
Alquilar es más caro que pagar la hipoteca
Uno de los últimos, realizado por el portal inmobiliario Idealista, revela que alquilar una vivienda de dos habitaciones en Asturias cuesta un 71% —83% en el conjunto de España— más que pagar la cuota hipotecaria a la que se debería hacer frente si se hubiera comprado, aunque antes habría que haber desembolsado unos 30.000 euros de entrada.
También ha quedado de manifiesto a lo largo de este año la gran desigualdad que existe en las rentas de propietarios e inquilinos, duplicando como mínimo las de los primeros a las de los segundos, que precisamente debido a la precariedad salarial que predomina en España no tienen ahorros suficientes para pagar la entrada de un piso y así tener mensualidades más desahogadas. Es la pescadilla que se muerde la cola mientras, para colmo, la oferta de alquileres permanentes baja y sube de manera considerable la de los de temporada.
Más alquileres de temporada que nunca
Otro informe de Idealista cifraba en un 154% el incremento de la oferta de alquileres de temporada en Oviedo por la caída del 44% de los de larga duración. Es un crecimiento desmesurado pero el peso de los alquileres de temporada aún está por debajo del promedio del país, aunque a ese ritmo más pronto que tarde podría ponerse a la par en las zonas tensionadas de las principales localidades turísticas de Asturias.
Alquilar un piso en Gijón hoy cuesta de media aproximadamente 700 euros cuando hace cinco años rondaba los 450 euros. La oferta es escasa, los precios suben más y la situación ha llegado a un punto en el que también aumenta en precio y en oferta el alquiler de habitaciones en pisos compartidos. Una habitación cuesta 330 euros de media al mes en Asturias, como recogía otro estudio de Fotocasa que cifraba en casi un 15% la subida registrada en el último año —35% más en cinco años— para una alternativa habitacional que no deja de ser otro signo más de la desigualdad social que existe.
Compartir piso ya no es una solución solo para los jóvenes, pero al menos en Asturias lo tienen también muy difícil para emanciparse en esas condiciones: ocho de cada 10 de entre 16 y 29 años siguen viviviendo con su padres incluso teniendo trabajo. De nuevo, los salarios bajos hacen imposible que se planteen alquilar o comprar.
Y, en lo que se refiere a la compraventa, Asturias viene registrando crecimientos también considerables. Este 2024 ya es el cuarto año consecutivo de tendencia alcista. El pasado julio aumentó hasta un 41,6%, el crecimiento más elevado que duplicó además la media del país. Tambien los préstamos hipotecarios registraron un aumento muy destacado, por encima de la media nacional y solo por detrás del 46,6% registrado en Castilla y León: en Asturias crecieron un 44,6%, aunque hay que tener en cuenta que menos de la mitad de las propiedades se compran con hipoteca.