La sidra asturiana defiende el concepto de «consumo moderado» que la nueva ley estatal de prevención trata de desterrar

ASTURIAS

sidra asturiana
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«Forma parte de nuestro estilo de vida, se consume socializando, habitualmente con comidas y de una forma razonable», defiende la asociación del sector en la región

11 ago 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El Ministerio de Sanidad ha elevado a audiencia e información pública el anteproyecto de Ley de Prevención del Consumo de Alcohol y de sus Efectos en las Personas Menores de Edad, una norma cuyo objetivo final, reducir el consumo de bebidas alcohólicas en jóvenes y adolescentes, nadie cuestiona. Sin embargo, el sector de la sidra asturiana, aun compartiendo el propósito de la norma, no comparte algunos de los conceptos que acoge. El principal, el de consumo moderado o responsable, que la ley quiere desterrar definitivamente.

Sanidad sostiene que ningún consumo es moderado o responsable, y el sector sidrero no está de acuerdo. Así lo expresa el presidente del consejo regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) «Sidra de Asturias», Victor Ramos, en su condición de lagarero y hostelero: «los fines de la ley son buenos, vemos críos de 15 años en botellones, borrachos, y eso hay que evitarlo, pero de ahí al otro extremo hay mucho; la sidra tiene cinco grados o seis, y todos los alcoholes no son lo mismo, estamos mezclando churras con merinas, no es lo mismo una bebida de 40 grados que una de seis; el consumo moderado siempre será una buena opción; el principal problema que veo en la ley es que equiparen nuestros productos a otros que tienen más graduación. No es lo mismo».

El lagarero reconoce que el tema «es controvertido y delicado», porque se mezclan asuntos de salud, pero cree que muchas de las medidas no son razonables, «es más una cuestión de educación». Un ejemplo: si hay una fiesta de fin de curso en un colegio en la que hasta ahora se llevaba agua para los menores y unas botellas de sidra para los padres, ahora ya no se podrá llevar sidra. ¿Ayudará esta prohibición a concienciar a los jóvenes de que no deben tomar alcohol? El lagarero lo duda, porque será solo en ese ámbito donde esté prohibido, y los niños verán a sus padres beber sidra en casa y en los bares. Solo en un lugar y un día determinado lo tendrán prohibido. El resto del año, y en cualquier otro lugar, verán a sus padres beber alcohol sin problema. «Son normas difíciles de entender», opina. En cualquier caso, considera que solo prohibir no sirve de nada. Se trata más de educar.

Hay otro aspecto de la norma que ha despertado una gran controversia en el sector hostelero, aquel que prohíbe la publicidad de bebidas alcohólicas en sillas y otros elementos de las terrazas de los bares que estén situados a menos de 200 metros de colegios, institutos y otros centros de menores. Esta cuestión, en opinión de Víctor Ramos, apenas afectará al sector de la sidra. Ciertamente, es raro ver bares o sidrerías con publicidad de sidra en sillas o terrazas. La mayoría suelen ser de cerveza. El lagarero cree que la medida afectará a grandes grupos empresariales, pero no a la gran mayoría de lagares asturianos. Y aun así, considera que «tiene poco recorrido». En este caso, la limitación de la publicidad cerca de los colegios e institutos tampoco parece muy eficaz, ya que los jóvenes y adolescentes no solo hacen su vida en el colegio, y lo normal es que pasen con frecuencia por bares y establecimientos que estén lejos de los centros educativos.

Por su parte, la Asociación de Sidra Asturiana (ASSA), que forma parte de la Asociación Española de Sidras (AESI), ha anunciado que presentará alegaciones junto con las otras organizaciones empresariales de bebidas con contenido alcohólico: Federación Española del Vino, Cerveceros de España y Federación Española de Bebidas Espirituosas.

En un comunicado, el colectivo presidido por María Cardín ha querido dejar muy clara su «tolerancia cero en el consumo de alcohol por menores, embarazadas, conductores profesionales, en actividades laborales», y defiende, en un sentido parecido al de Víctor Ramos, «un consumo moderado por adultos sanos». Insiste en que las bebidas de su sector, las fermentadas con contenido alcohólico, entre las que  estarían la sidra, el vino y la cerveza, «se consumen moderadamente por adultos sanos», y destaca que «forma parte de nuestro estilo de vida, se consume socializando, habitualmente con comidas y de una forma razonable».

Dicho esto, la asociación considera prematura cualquier acción más allá de transmitir sus principios respecto al consumo de bebidas fermentadas de baja graduación alcohólica, ya que el asunto «está iniciando su fase de discusión».