Balance de la renta: los 111 superricos de Asturias

L.O.

ASTURIAS

F. Sotomonte

Los datos de la Agencia Tributaria revelan un gran brecha en la proporción de grandes fortunas por territorio

30 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

La buena o mala fortuna puede parecer una apreciación subjetiva, pero en lo que atañe al vil metal la Agencia Tributaria lo tiene clarísimo y ha establecido su medida precisa para categorizar a los súper ricos, aquellos que declaran una renta por encima de los 601.000 euros. Obviamente se trata de un grupo muy reducido de personas y además no está repartido igual en todo el país sino que tienden a concentrarse en determinados sitios. En Asturias suman una cifra redonda: son 111 personas.

Así lo revelan los datos del informe de la Agencia Tributaria analiza la evolución del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) y que fue actualizado a comienzos de este mes de julio. En ellos se detalla que a los más afortunados les va de cine en España, más que de costumbre es decir, porque el privilegiado grupo que declara por encima de los 601.000 euros es el que más ha crecido respecto al resto de lo tramos de renta, más de un 24%.

Los súper ricos de Asturias, al menos según los datos de Hacienda, fueron en el año 2022 un total de 111 personas, y suponen un porcentaje muy poco representativo de la sociedad del Principado: la comunidad es uno de los territorios en los que hay menos ricos por habitante, son apenas dos de cada 10.000 declarantes por encima de los 601.000 euros los que se contabilizan en Asturias, pero no es así en todas partes.

Asturias comparte proporción de ricos con Cantabria, Castilla-La Mancha y Castilla y León. Extremadura es la comunidad con menos ricos por declarante (1 por cada 10.000); y lo cierto es que la inmensa mayoría de comunidades oscila en números también muy pequeños (de tres a cinco súper ricos por cada 10.000 declarantes) pero hay tres lugares concretos en los que esa tasa se dispara. En el podio de las comunidades con más ricos se encuentran Cataluña (con 8 súper ricos por cada 10.000 declarantes), Baleares (10) y por encima de todos y con mucha diferencia Madrid, con 18, más del doble que la media nacional, que es de 7.

En esa diferencia tiene que ver, al menos a ojos de muchos actores políticos, las diferencias fiscales, como ha ocurrido de forma reiterada en Asturias con el impuesto de sucesiones, las medidas para atraer a lo grupos de mayor fortuna para asentarse en la capital ha despertado más de un choque con otras comunidades.

Con todo y pese que a los impuestos protagonizan los debates públicos sobre la población de mayor renta, lo cierto es que en el caso del impuesto de solidaridad a las grandes fortunas (que fue establecido por el Ejecutivo central para sortear las rebajas al tributo de Patrimonio de las comunidades con gobiernos conservadores) lo paga un número más pequeño aún en las tablas de la Agencia Tributaria. El impuesto de solidaridad a las grandes fortunas afecta a los patrimonios netos superiores a 3 millones de euros, se devenga el 31 de diciembre de cada año y la presentación de la declaración se produce entre el 1 y el 31 de julio. En el balance realizado en septiembre del año pasado se contaron en Asturias sólo 10 contribuyentes de este impuesto. En el conjunto de España lo abonaron 12.010 grandes patrimonios.

En un balance anterior, analizado datos estadísticos de estos declarantes de altas rentas en Asturias, se deducía que eran en el Principado más mujeres que hombres sumando en total una fortuna de 4.520.558.321 euros.

Una inmensa mayoría tiene su patrimonio en Capital mobiliario, esto es, acciones principales y obligaciones, bonos y deuda pública. Cuentan también un importante porcentaje de los ricos asturianos con patrimonio mobiliario, mucho más urbano, de forma abrumadora, que naturaleza rústica (en fincas) ya que de este punto apenas de sobrepasa el millar. 

En este registro se cuentan contribuyentes de Patrimonio en el Principado con bienes suntuarios (es decir, vehículos, joyas, pieles) sumando más de 800 contribuyentes pero sólo siete han pagado este tributo por contar con un patrimonio relevante en objetos de arte y antigüedades.