El mal tiempo y el riesgo de aludes paralizan la búsqueda por tierra en San Isidro
ASTURIAS
«No habría manera de que nuestros rescatadores sobrevivieran a otra avalancha», indica el jefe supervisor de Bomberos del SEPA, tras el rápido empeoramiento de las condiciones meteorológicas
02 ene 2021 . Actualizado a las 19:02 h.La mala meteorología está complicando las labores de búsqueda del operario de carreteras desaparecido ayer tras ser sepultado por un alud de nieve en el puerto de San Isidro, en Aller. El rastreo por tierra, que se había reanudado esta mañana, ha tenido que suspenderse a primera hora de la tarde por seguridad ante el riesgo de nuevos aludes en la zona, en la que anoche se encontraba el cadáver de un segundo trabajador.
El jefe supervisor de Bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), Eduardo Rubio, fue muy claro esta tarde, desde el puesto de mando en Felechosa, en cuanto a la complejidad de la búsqueda. «La meteorología es muy cambiante y en poco más de una hora ha evolucionado a peor rápidamente. Los puntos en los que podríamos trabajar con medios humanos son muy peligrosos dado que la nieve se está moviendo, se puede desplazar y no habría escapatoria para nuestros rescatadores. No habría manera de que sobrevivieran a otra avalancha», indicó.
También el presidente del Principado, Adrián Barbón, a través de sus redes sociales y tras mostrar su solidaridad con las familias de los trabajadores de la Consejería de Infraestructuras, Medio Ambiente y Cambio Climático, se refería a la complicada búsqueda que se está llevando a cabo en San Isidro desde ayer. «El tiempo en la zona es infernal y eso ralentiza mucho las labores de rescate por parte de unos profesionales con amplia experiencia en situaciones límite. Tenemos que ser conscientes que las labores deben realizarse en unas mínimas condiciones de seguridad para no exponer a riesgos a los equipos de rescate. El riesgo de aludes es muy alto en la zona y el tiempo no da tregua», indicó, mostrando también todo su apoyo a la labor del equipo que participa en el rescate.
Mientras las condiciones meteorológicas sigan sin permitir esa búsqueda por tierra, se emplearán drones para rastrear la zona en la que ya fue encontrada parte de la máquina quitanieves, que fue arrastrada por el fuerte alud unos 200 metros hasta el fondo de la ladera próxima a la carretera de acceso al puerto de San Isidro, a la altura de Riofrío. «Es una ubicación muy peligrosa tal como está la nieve y la ladera. El dispositivo va a seguir con drones que nos van a permitir evaluar zonas a las que no hemos podido acceder por tierra y, si es posible, con helicóptero», explicó Rubio, que realizó estas declaraciones a los medios acompañado por los consejeros de Presidencia, Rita Camblor, y de Medio Rural y Cohesión Territorial, Alejandro Calvo, en Felechosa.
También se va a intentar hacer una prueba con equipos caninos para buscar algún tipo de rastro que ayude a acotar la zona en la que buscar. «Son más de 200 metros desde la carretera al canal y, ante el espesor de nieve, es un trabajo muy arriesgado. Si podemos concretar una zona menos amplia nos facilitaría la labor», indicó Rubio. Sin embargo, según informaron desde el SEPA a las seis y media de esta tarde, tampoco fue posible utilizar el dron que iba a sobrevolar la zona debido a esas malas condiciones meteorológicas de la zona. Se espera que pueda utilizarse mañana, domingo, cuando está previsto que continúen su labor, si el tiempo lo permite, efectivos de Bomberos del SEPA, además de la Unidad Militar de Emergencias y la Guardia Civil.
Calvo, en las declaraciones realizadas a primera hora de la tarde en Felechosa, puso también en valor el trabajo de los dos servidores públicos accidentados, que habían acudido a San Isidro para realizar labores ordinarias de mantenimiento de la carretera, cerrada al tráfico por las intensas nevadas, y el de quienes están participando en las labores de rescate. «Nuestra prioridad ahora mismo son sus familias y la seguridad de los rescatadores», indicó.