El presidente del Principado asegura que habrá «semanas muy duras por delante» y que los brotes «seguirán surgiendo»
21 ago 2020 . Actualizado a las 12:45 h.El Principado promete tomar decisiones impopulares si la epidemia del coronavirus empeora. El presidente regional, Adrián Barbón, asegura estar preparado para las críticas, porque la prioridad es evitar nuevos contagios, esquivar el confinamiento y salvar vidas. Así lo ha transmitido en un vídeo grabado en el despacho de la Presidencia y difundido a través de sus redes sociales. Barbón llama a la población «a no bajar la guardia». A cambio, promete contundencia.
«Nos quedan semanas muy intensas por delante», vaticina el jefe del Ejecutivo asturiano, que ha reconocido que los brotes seguirán surgiendo y que la administración tratará de tenerlos controlados. Las PCR y la vigilancia de los contactos estrechos son las dos herramientas básicas. Barbón recuerda que se han llegado a practicar hasta 4.000 pruebas para delimitar un foco en un establecimiento público y ha adelantado que se harán más cribados comunitarios, como el realizado en Poo de Cabrales, si fuese necesario proteger una población vulnerable. Explica que la situación «no es fácil» y da por supuesto que va a tener que «tomar decisiones por impopulares que sean». De hecho, asume las críticas incluso por adelantado pero adelanta que adoptará medidas «por duras que sean».
Se ha expresado en estos términos el mismo día que la Consejería de Salud presnta el plan de respuesta rápida ante un posible aumento de la incidencia del coronavirus. En ese plan se contemplan tres escenarios diferentes. El primero, el actual, los positivos están controlados, existen focos y no es necesario incrementar recursos. El segundo, con transmisión comunitaria controlada, obligaría a adoptar nuevas medidas. El tercero, con una transmisión comunitaria incontrolada, que es la situación inicial de la pandemia, obligaría a paralizar todo el sistema sanitario y concentrarse solo en la COVID-19, tal y como se hizo durante semanas.
Barbón está preocpado por el crecimiento de contagios, aunque reconoce que Asturias, con los datos en la mano, «está comparativamente mejor». Pero no es suficiente. Por eso la administración seguirá vigilante durante semanas.