El curso será presencial y se desdoblarán 286 aulas aprovechando todos los espacios posibles. Educación contratará a 400 profesores e invertirá 30 millones de euros
13 jul 2020 . Actualizado a las 14:07 h.El curso que empezará en septiembre será presencial. Para ello el Gobierno regional contratará a unos 400 profesores e invertirá 30 millones de euros. Hasta Cuarto de Primaria la ratio se establecerá en 20 alumnos y se desdoblarán 286 aulas, aprovechando todos los espacios posibles de los centros. A partir de Quinto se mantendrán los grupos de 25 alumnos, en Bachillerato serán de 30 y en Formación Profesional de 20. Habrá comedor y transporte y los niños comerán por turnos. Educación ha afirmado que la prioridad será la pública frente a la concertada y privada y que habrá que compatibilizar las nuevas medidas con el uso de la mascarilla y el mantenimiento de la distancia social.
Faltan dos meses para el inicio del curso. El regreso de los alumnos se producirá el 10 de septiembre en Infantil y Primaria, mientras que los estudiantes de ESO y Bachillerato comenzarán el día 14 y los de Formación Profesional, el 18 de septiembre. El escenario para esas fechas es incierto y la evolución de la pandemia imprevisible, pero el Principado ya ha hecho públicas las directrices con las que quiere afrontar la vuelta a las clases. La principal conclusión es que desecha la opción de utilizar un modelo mixto y que su apuesta es por la enseñanza presencial. «Hemos descartado otros modelos que son más baratos porque la calidad en la enseñanza pasa por la presencialidad», ha defendido Juan Manuel Cofiño, vicepresidente del Ejecutivo autonómico. Según ha detallado la consejera de Educación, Carmen Suárez, la docencia online «aumenta más la brecha educativa», mientras que la educación presencial «es un factor compensador de diferencias».
Eso sí, Suárez ha añadido que paralelamente a ese retorno a los centros se intensificará la apuesta por la digitalización mediante la «adquisición de competencias digitales en el aula, con un plan de formación para el profesorado y con la edición de guías para las familias». El objetivo es estar preparados para el supuesto de que sea necesario un nuevo confinamiento. «Ahora tenemos experiencia», ha aseverado la consejera.
La nueva ratio establecida por el Principado para los alumnos más jóvenes tiene dos consecuencias inmediatas. La primera es que será necesaria la contratación de unos 400 profesores. La cifra exacta se anunciará cuando el Gobierno autonómico baje al detalle de cada centro. La segunda es que será necesario utilizar todos los espacios disponibles en los colegios y desdoblar 286 aulas. El término exacto utilizado por la consejera es la creación de «grupos flexibles». Es decir, si hay tres grupos de 21 alumnos no se desdoblan en seis sino que se crea un cuarto que permita cumplir con la ratio de 20 alumnos en todos los casos. Estos grupos serán estables -en otras comunidades se les ha denominado grupos burbuja- y tendrán el mínimo contacto posible entre ellos. Además, se intentará que el número de profesores que esté en contacto con ellos sea el menor posible para facilitar los rastreos en caso de que se produzca algún positivo.
La consejera ha descartado que sea necesario levantar barracones en ningún colegio. Según ha asegurado, todos los centros pueden cumplir las nuevas exigencias utilizando los espacios que tienen disponibles. La única excepción son «tres o cuatro» centros en Oviedo y en Gijón, ha explicado, casos para los que los ayuntamientos ya han ofrecido soluciones con la posibilidad de ceder otras instalaciones. Tampoco será necesario que los centros abran por las tardes porque, según Suárez, «utilizando todos los espacios posibles consideramos que se puede cumplir».
Comedor y transporte
El otro extremo que ha confirmado la consejera es que habrá servicio de comedor y de transporte. En este último caso se mantendrán las rutas y se exigirán los mismos protocolos que para acceder al transporte público. En cuanto al comedor, se establecerán turnos para garantizar que se cumplen las medidas sanitarias y de higiene.
Además, cada centro escolar deberá adaptar el plan de contingencias que ya elaboró a finales del curso pasado para hacer frente al nuevo escenario. Ahí quedarán detallados aspectos como los horarios de entrada y salida, el número de puertas a utilizar, los itinerarios que deben seguirse o el sentido de la circulación en cada parte del centro.
30 millones de inversión
La implementación de todas estas medidas tendrá un coste de unos 30 millones para el Principado. Según ha detallado la consejera, además del capítulo destinado a personal, conformarán esta partida aspectos como la digitalización que quieren impulsar en las aulas, la adaptación de los contenidos educativos, la limpieza e higiene, la señalización de las medidas y la adaptación de las infraestructuras a las nuevas exigencias.
En este punto, Cofiño ha dejado claro que «todo lo que venga del fondo estatal para educación se gastará en educación. No escatimaremos nada». El vicepresidente ha aseverado que estas medidas «tendrán el soporte económico que sea necesario».
Escuelas de 0 a 3 años
El protocolo a seguir en esta etapa todavía está por definir. La consejera ha especificado que tienen prevista una reunión con la Federación Asturiana de Concejos en la que les entregarán el borrador de un protocolo de actuación. Ahí se incluyen propuestas de higiene y de salud y se especifica la normativa que tienen pensado implementar, pero su intención es que los ayuntamientos aporten sus ideas para configurar un documento definitivo.
Apuesta por la pública frente a la concertada
La administración tiene recursos limitados y Cofiño no ha tenido duda al asegurar que «el Principado concentrará sus esfuerzos en la enseñanza pública». Las disposiciones que ha anunciado son para todas las modalidades educativas, también para la concertada y para la privada, motivo por el que les ha pedido «un esfuerzo» para cumplir con las nuevas exigencias. «Estoy seguro de que cumplirán, como lo están haciendo todos los sectores», ha afirmado el vicepresidente, quien ha añadido que «les pedimos el mismo esfuerzo» que al resto de actores económicos.