El laboratorio de virología del HUCA está a la vanguardia de España en análisis de muestras de COVID-19. Llega a realizar más de 800 en un solo día

Carmen Liedo

Si hay un equipo que conoce bien el coronavirus, que cada día lo busca en las centenares de muestras que procesan y que intenta detectarlo en el menor tiempo posible, ese es el equipo de virología del HUCA, un equipo que se ha reforzado estos días y que trabaja a tres turnos (mañana, tarde y noche) para que médicos, enfermeras y auxiliares conozcan si ese paciente es positivo o no en el virus y actuar en consecuencia. En total, casi una treintena de profesionales, entre facultativos, investigadores, técnicos y secretarias trabajan para que el resultado de las muestras esté lo antes posible. Tal es el ritmo que imprimen que este laboratorio está a la cabeza de España en análisis de pruebas. En la jornada del martes batieron el record de muestras procesadas, con 830 (el doble de las que procesaban hace una semana), por lo que Santiago Melón, responsable del laboratorio de virología del HUCA, no duda en afirmar que están dando «una respuesta que no se da en ningún otro sitio de España». Este laboratorio ya supera los 7.000 análisis desde que llegó la pandemia a Asturias.

«No hay ningún laboratorio que responda tan rápido», asegura. Destaca que «no hay test que queden de un día para otro». Y eso que el procesado de las muestras requiere unos tiempos que no se pueden acelerar. Lo único que puede demorar el resultado de unas muestras respecto a otras es que hacen grupos de 96 muestras para optimizar tiempo y recursos.

Por el momento, los cuatro facultativos, el investigador, los tres residentes que van rotando, el becario que da apoyo, las cuatro secretarias (de las que dos son para COVID-19 y otras dos compartidas con el resto microbiología) y los 15 técnicos, enumera Marta Álvarez-Argüelles, hacen turnos y cumplen su horario, aunque el responsable del laboratorio reconoce que durante su jornada «trabajan mucho y muy bien» y «con la misma responsabilidad de antes de llegar todo esto». 

Pero ¿cómo es el COVID-19? Santiago Melón explica que este virus tan contagioso «no tiene nada de particular» y que para su análisis se siguen «los mismos protocolos que se vienen utilizando desde hace mucho tiempo para cualquier otra infección viral». Así, dice que «utilizamos la misma metodología y cuando llega la muestra la procesamos y hacemos las técnicas oportunas para detectar el genoma viral», lo cual lleva entre una hora y media y dos horas. «Una vez detectado el virus que se quiere, diseñamos primas o dianas específicas. Lo buscamos igual que para una gripe o un herpes, y eso lleva aproximadamente otra hora y cuarto», señala el mismo, que precisa que los reactivos que se utilizan los llevan trabajando mucho tiempo.

Dado que son centenares las muestras que se están analizando, en el laboratorio de virología del HUCA usan reactivos genéricos que tienen un coste muy inferior a los kits comerciales de diagnóstico viral, que pueden oscilar entre los siete y los diez euros. «A nosotros nos puede salir por un coste de entre uno y dos euros», precisa el jefe del laboratorio de virología del HUCA. Para mejorar más la respuesta si cabe, este laboratorio mantiene la comunicación e intercambia información con virólogos de otros hospitales.

Lo que no ayuda en absoluto a esta crisis sanitaria, en opinión de Santiago Melón, es que gente mediática pero sin conocimiento ninguno sobre el COVID-19 hable en los platós de televisión como si fueran expertos. Con los comentarios de algún personaje conocido asegura que «se nos ponen los pelos de punta» e, incluso, manifiesta que «nos complica el trabajo, porque la gente escucha cosas que no son así». «La gente que opina enturbia la situación y reconozco que nos ponemos de los nervios, porque después nosotros tenemos que lidiar con ello», traslada el responsable de virología del HUCA, que rechaza que a esta crisis sanitaria se le de un toque «sensacionalista».