Desde Navia hasta Grandas de Salime, descubre la magia de los principales castros del corazón de la región
26 jul 2018 . Actualizado a las 11:37 h.Asturias es valiosa no sólo por lo que ofrece, sino también por lo que esconde. Son muchos los secretos que guarda y que se han ido descubriendo a lo largo de los años. Un relato de la historia astur desde el inicio de los tiempos. Y uno de los elementos más importantes que marcan una época determinante de nuestra región son los castros, que recorren parte de la costa asturiana para terminar adentrándose en el corazón del mapa asturiano. Desde Navia hasta Grandas de Salime, el río Navia es el principal protagonista de una ruta natural que nos guía por los poblados celtas de Asturias.
Castro de Coaña
Situado al margen izquierdo de la ría de Navia, sobre una colina, se encuentra el castro de Coaña, un yacimiento en el que se conservan ochenta cabañas protegidas por una gruesa muralla. Fue el primer castro estudiado, y su excavación fue iniciada en 1877 por José María Flórez y continuada por Antonio García y Bellido y Juan Uría Ríu tras la Guerra Civil.
La estructura de este asentamiento se compone de los siguientes elementos:
La acrópolis. Recinto de planta triangular rodeado por una muralla, cuyo acceso estaba protegido por un torreón de planta cuadrada. Desde este torreón se realizaban labores de vigilancia dentro del recinto. Supone el elemento más especial del poblado.
El barrio norte. Espacio situado bajo la muralla norte de la acrópolis formado por 80 cabañas con otra muralla más pequeña. Estas cabañas poseen, en su mayoría, planta circular, algunas de ellas con vestíbulo o corredor. Se calcula que llegaron a vivir entre 1.500 y 2.000 personas.
El recinto sacro. La existencia de dos grupos de construcciones asociadas a canalizaciones y a una piscina de granito denominada «bañera» hace pensar en la existencia de termas o saunas rústicas dentro del poblado.
El horario de invierno (del 1 de octubre al 31 de marzo) es de miércoles a domingo de 10.30 a 15.30 horas. Lunes y martes cerrado. El horario de verano (del 1 de abril al 30 de septiembre) es de miércoles a domingo de 10.30 a 17.30 horas. Lunes y martes cerrado.
El precio general de la entrada es de 3,13 euros. La entrada reducida, para niños de 7 a 12 años, ersonas mayores de 65 años y miembros de familias numerosas es de 1, 62 euros. Niños hasta 7 años acceso gratuito. Los miércoles la entrada es gratis.
Castro de Pendia
Situado en las proximidades de la localidad homónima, en el concejo de Boal, el castro de Pendia fue excavado en 1941 bajo la dirección de D. Antonio García y Bellido y D. Juan Uría Ríu, aunque las primeras noticias que dan cuenta de su existencia datan de 1898, cuando Bernardo Acevedo y Huelves realiza una primera descripción de las ruinas. Fue declarado Monumento el 26 de enero de 1981.
Sus características principales son bastante inusuales, dado que se considera que las murallas levantadas eran demasiado potentes para el pequeño poblado que se albergaba en su interior, donde se calcula había únicamente 12 cabañas. Se descubrieron también dos saunas similares a la encontrada en el castro de coaña.
El castro se divide en dos zonas claramente diferenciadas:
Sector norte. En él se encuentra una cabaña de grandes dimensiones, protegida por varios elementos defensivos. Se cree que estaba destinada a uso comunal.
Zona meridional. Aquí se sitúa el resto del poblado, donde destacan las dos saunas. La primera, la sauna prerromana, se sitúa cercana a la entrada del sector norte. Data de los siglos IV-II a.C y contaba con un horno semicircular, una cámara rectangular, y un vestíbulo. La segunda es una sauna de la época romana que consta de una cabecera, una cámara principal y un vestíbulo de entrada.
Su acceso es libre y gratuito.
Castro de Illano
El Castelón de Illano, en el concejo de Boal, posee una localización característica de otros muchos castros de la región. Fue instalado a media ladera y estaba protegido por un foso. Una muralla de cuatro metros de altura rodea todo su perímetro y es, probablemente, una de las mejor conservadas. Su principal característica es que nunca ha sido excavado pero, a pesar de ello, son varias las construcciones originales que aún sobresalen en el prado. Se trata de edificios fabricados en pizarra, de planta sencilla y esquinas redondeadas situados sobre la explanada que corona el yacimiento.
Su acceso es libre y gratuito.
Castro de Chao Samartín
Catalogado como castro en 1967, Chao Samartín es la expresión de una extraordinaria secuencia estratigráfica que ha facilitado su revisión desde que dieron comienzo las excavaciones del yacimiento en 1990.
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