
El coordinador Ramón Argüelles se muestra «optimista» pero advierte de que los márgenes sobre partidas se reducirán cuendo el texto se presente
24 nov 2017 . Actualizado a las 17:21 h.Izquierda Unida ha planteado al Gobierno asturiano un incremento de 20 millones de euros en las partidas dedicadas al gasto social previstas en el proyecto de presupuestos como condición fundamental para dar su respaldo a las cuentas. El coordinador de la coalición en Asturias, Ramón Argüelles, consideró un «error» que los socialistas no hubieran aceptado su demanda de revisar la reforma del impuesto de sucesiones pero descartó en todo caso que ese asunto supusiera una línea roja en las negociaciones y destacó que, en todo caso, si desde el Ejecutivo se plantaban un medio alternativo para dotar de más recursos al gasto social «no lo vamos a cuestionar».
En concreto, Argüelles apuntó que su grupo quiere incrementar a 150 millones de euros los fondos dedicados a gasto social sobre la previsión de 130 millones que se ha visto en las negociaciones y destacó su apuesta por una mejora del Salario Social, programas contra la pobreza infantil y energética, así como para favorecer el acceso a la vivienda. Otros puntos destacados de sus planteamientos son aumentar las medidas de control de la contaminación, el refuerzo de la Atención Primaria en Sanidad o un impulso a la situación de la lengua asturiana en las retransmisiones de la televisión autonómica.

Respecto a la escuela de 0 a 3 años, un punto esencial en el debate entre los tres grupos (PSOE, Podemos e IU, susceptibles de encontrar un acuerdo, Argüelles apostó por «negociar con los ayuntamientos y los sindicatos» para ampliar el servicios. Se trata de un asunto crucial en el que el Ejecutivo ha apostado por buscar un modelo que integre ese ciclo en el sistema público pero que debería desarrollarse en lo que resta de la legislatura.
«Son propuestas constructivas y que se ve que no son sermones, en IU somos laicos y no nos gusta la parafernalia», destacó Argüelles quien insistió en que la coalición defiende que «debe haber un presupuesto de la izquierda porque sería bueno para los asturianos y malo para la derecha» y lamentó que no hubiera sido posible negociar en bloque junto a Podemos «como hemos hecho en asuntos como la ley de emergencia social».
La cuenta atrás
El Gobierno presentará el documento de los presupuestos el próximo martes al mediodía y todavía habrá un margen, entre las enmiendas y el debate parlamentario, para la negociación. Pero Argüelles advirtió de que una vez que el texto sea acogido por la mesa de la cámara dentro de cuatro días, los márgenes para plantear propuestas globales se estrecharán mucho. «El martes ya no podremos tocar los ingresos, sólo se podrán hacer transferencias entre las partidas de cada consejería y cada nueva propuesta tendrá que ser a costa de sacrificar algo en otra partida». En este sentido, insistió en la importancia de cerrar un acuerdo y señaló que, en todo caso, su dirección someterá el documento a la votación de sus militancia pero si se asumieran las condiciones hoy señaladas «nuestra recomendación sería aprobarlo».
Argüelles resaltó que no hay todavía un acuerdo cerrado (las conversaciones se prolongarán a lo largo de todo este fin de semana) pero afirmó que «el tono ha sido bueno» y que era «optimista» sobre los resultados.