Trump siembra la alarma en Europa con sus pretensiones sobre Groenlandia

Miguel Palacio NUEVA YORK / E. LA VOZ

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Sheinbaum sugiere llamar «América Mexicana» a EE.UU. apelando a un texto de principios del siglo XIX.
Sheinbaum sugiere llamar «América Mexicana» a EE.UU. apelando a un texto de principios del siglo XIX. Mario Guzmán | EFE

La inviolabilidad de fronteras también es vinculante para EE.UU., aclara Scholz

09 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Todavía no ha pisado la Casa Blanca y Donald Trump ya siembra el desconcierto con las ambiciones expansionistas que promete imponer durante su presidencia. Sus planes de anexionarse Groenlandia, Canadá, el canal de Panamá y México, tras tacharlo de ser un narco Estado, han desatado la alarma. La Comisión Europea, Alemania y Francia rechazaron la amenaza del presidente electo de por la fuerza militar o la imposición de aranceles hacerse con el control de la isla administrada por Dinamarca.

El canciller alemán, Olaf Scholz, recordó a Trump que por mucho que presida el país más poderoso del mundo, las fronteras nacionales también son inviolables para él. «El principio de la inviolabilidad de fronteras está vigente para todos los países, da igual si están al este o al oeste», dijo. «Todos deben cumplirlo, sean un país pequeño o una potencia muy grande», añadió el jefe de Gobierno germano, que trazó un paralelismo entre las declaraciones del estadounidense y la invasión de Ucrania lanzada por Vladimir Putin en el 2022.

Derecho internacional

En París, el ministro de Exteriores francés, Jean-Noël Barrot, declaró que Europa defenderá el derecho internacional: «La UE no puede permitir que otras naciones del mundo, sean quienes sean, ataquen sus fronteras soberanas». Aunque se mostró escéptico ante la posibilidad de que el republicano cumpla su agenda de expansión, afirmó que con su vuelta al despacho oval el mundo debe ser consciente de que entramos en una época de «la ley del más fuerte». Un cambio de era ante el que, según el francés, no hay que aceptar la intimidación sino que «hay que despertarse» y «reforzarse» militarmente. La portavoz del Ejecutivo francés, Sophie Primas, fue más allá y tachó las palabras de Trump de «una forma de imperialismo».

La Comisión Europea defendió que «la soberanía de un Estado tiene que respetarse y es un valor diplomático y un principio clave con el que trabajamos en todos los casos», en palabras de la portavoz de Exteriores, Anitta Hipper. Yendo más allá, la portavoz jefa del Ejecutivo europeo, Paula Pinho, señaló que Groenlandia está cubierta por la defensa colectiva que establecen los tratados de la UE. Un escenario que, de todas formas, calificó de «extremadamente teórico». Desde Dinamarca, su ministro de Asuntos Exteriores, Lars Løkke Rasmussen, recalcó que el país escandinavo «no busca fricciones, sino colaboración».

Al otro lado del Atlántico, la crisis provocada por las declaraciones de Trump no amaina en Canadá, a pesar de los movimientos políticos de cara a unas elecciones anticipadas tras la renuncia de Justin Trudeau. «Jamás, pero jamás, Canadá será parte de EE.UU.», señaló el todavía primer ministro a través de las redes sociales. La titular de Exteriores, Mélanie Joly, quiso además dejar claro que considera que las declaraciones de Trump son «amenazas» que ponen en riesgo la relación entre ambos países.

En México, la presidenta Claudia Sheinbaum tachó de «falsas» las declaraciones de Trump sobre que «México está esencialmente gobernado por los carteles» del narcotráfico, antes de amenazar de una vez con la imposición de aranceles por no frenar la migración. Sheinbaum, que cumplía este miércoles cien días en el poder, también respondió a la propuesta del estadounidenses de rebautizar el golfo de México —nombre reconocido desde 1607, «mucho antes de que existiera EE.UU.», dijo— como «golfo de América», al sugerir con ironía que Estados Unidos debería llamarse entonces «América Mexicana», apelando a un texto de principios del siglo XIX. «Se oye bonito, ¿no?», añadió.