Salvador Illa y Carles Puigdemont eluden el primer intento de investidura en la Cámara catalana
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El socialista pide tiempo para convencer a ERC mientras el de Junts dilata su regreso
20 jun 2024 . Actualizado a las 21:25 h.El primer debate de investidura en Cataluña quedará este miércoles oficialmente desierto. «No puedo forzar a nadie a que presente candidatura», dijo este martes el presidente del Parlamento, Josep Rull, que este miércoles se reunirá con el ganador en las urnas, Salvador Illa. Conforme al guion previsto, Rull le ofrecerá la oportunidad de buscar el apoyo de los 68 diputados que conforman la mayoría absoluta de la Cámara para ser investido presidente de la Generalitat. La reunión tendrá lugar a mediodía, pero ya se conoce el resultado: el líder de los socialistas catalanes le dirá que no cuenta con esos números y que necesita «más tiempo» para conseguirlos. Antes, se habrá reunido con los parlamentarios de Junts y de Esquerra, los tres grupos mayoritarios, después de que este martes lo hiciera con los minoritarios.
Los republicanos tacharon de «irresponsables» a socialistas y neoconvergentes por eludir el primer debate. «Que se atrevan a presentarse a la investidura, a explicar a la ciudadanía cuál es su proyecto de país e intentar construir un acuerdo desde la máxima transparencia», terció la secretaria general adjunta de Esquerra, Marta Vilalta, que instó a Rull a «alentar» la investidura de los presidenciables en lugar de limitarse a constatar su ausencia.
Mientras, los equipos negociadores de PSC y ERC se reunieron por primera vez en Barcelona para tratar de allanar la investidura del futuro inquilino del Palacio de la Generalitat. La intención de Illa es articular una mayoría progresista con comunes y republicanos, con el principal escollo, la financiación singular de Cataluña, en el tejado de Pedro Sánchez.
Por su parte, la candidata de Comuns, Jéssica Albiach, solo contempla un acuerdo entre los partidos de izquierdas o una repetición electoral. A su juicio, «no tendría ningún sentido» ir a una investidura cuando el candidato a encabezar el Gobierno no tiene los apoyos suficientes.
A primera hora de esta tarde, el presidente del Parlamento dará a conocer su decisión. Casi con toda probabilidad, recurrirá al denominado «acto equivalente», un escrito razonado que se publicará en el Boletín del Parlamento, previsiblemente el martes que viene, y que servirá para activar el plazo de dos meses para disolver la Cámara y, si el bloqueo persiste, convocar nuevas elecciones.
Votos delegados
Por otro lado, el Tribunal Constitucional rechazó suspender de forma cautelar el acuerdo de la Mesa de edad del Parlamento que aceptó el voto delegado de los diputados electos de Junts Carles Puigdemont y Lluís Puig, para la elección de los órganos de la Cámara, el presidente y los miembros de la Mesa, de mayoría independentista. Los magistrados de la Corte de garantías entienden que estos «no fueron determinantes del resultado de las votaciones celebradas el pasado 10 de junio».
El manifiesto de críticos a Oriol Junqueras alcanza las 500 firmas
El manifiesto de dirigentes y altos cargos de ERC que piden una «renovación total» del partido, incluyendo (aunque sin citarlo) a Oriol Junqueras, alcanza ya el medio millar. Los republicanos afrontan su travesía del desierto con una dirección interina y un expresidente y líder carismático recorriendo Cataluña en busca de apoyos. Este martes, uno de los firmantes, el consejero en funciones de Trabajo y Empresa de la Generalitat y expresidente del Parlamento, Roger Torrent, se puso a disposición del partido. «Esquerra es mi casa, la quiero y quiero que le vaya lo mejor posible; y quiero contribuir, sentar las bases para un nuevo ciclo ganador. ¿Dónde y cómo? Pues no lo sé», señaló en una entrevista en Rac1. Torrent afirmó que la renovación «no va en contra de nadie» y que todos los militantes, incluidos Junqueras, Rovira y Aragonès, «deben tener un encaje» en Esquerra.
La veterana formación republicana sufre una implosión interna tras un ciclo electoral que culminó el pasado 12 de mayo con la pérdida de 13 escaños en el Parlamento catalán. Al manifiesto de los 500 dirigentes, conocido el pasado domingo, se sumó este martes otro, en este caso protagonizado por medio centenar de militantes de base del sector más secesionista. Estos piden construir una nueva dirección que «devuelva el partido al independentismo», ya que el actual liderazgo «no es el equipo idóneo» porque «se ha alejado del espíritu del 1-O». Por ello, reclaman que del congreso de noviembre surja una «candidatura esperanzadora que enderece la orientación estratégica del partido hacia el punto donde estaba en el 2017».