El Congreso aprueba la ley de amnistía que intenta borrar todos los delitos del «procés»

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

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Los independentistas cantan victoria y afirman que la próxima estación es el referendo

30 may 2024 . Actualizado a las 19:19 h.

El Gobierno y sus aliados parlamentarios aprobaron este jueves definitivamente la ley de amnistía al levantar el veto impuesto por la mayoría absoluta del PP en el Senado. La norma, que pretende borrar todos los delitos cometidos por los encausados en el procés y por los disturbios posteriores al anuncio de la sentencia para los dirigentes independentistas, abarca desde noviembre del 2011 hasta noviembre del 2023. Fueron en total 177 votos a favor y 172 en contra. La diputada de Podemos Martina Velarde no pudo asistir al pleno y propició que los partidarios de la norma obtuvieran un voto menos de los 178 previstos.

En un debate bronco y plagado de interrupciones, el líder del PP, Alberto Núñez Feijoo, aseguró que para Pedro Sánchez los españoles solo valen «siete votos» en referencia al apoyo de Junts. Pidió al Gobierno que no hable de «convivencia» porque de lo que se trata es de un caso de corrupción política.

Según Feijoo, lo que este jueves hizo el Congreso es intercambiar «poder a cambio de impunidad y privilegios». «Hoy presenciamos el acta de defunción del PSOE», sostuvo, tachando de «cobarde» a Sánchez por no asistir al debate.

El portavoz socialista, Artemi Rallo, respondió a los ataques desde las filas de Vox acusando a los diputados de la formación de Abascal de «neofascistas» y «filonazis». Rallo defendió la ley de amnistía asegurando que «abre la puerta al acuerdo y al diálogo» con la meta de la justicia y el bienestar para los catalanes.

La portavoz de Junts, Miriam Nogueras, aseguró que «esta ley no es perdón ni clemencia, es una victoria democrática». «La lucha continúa, la independencia es el objetivo», recalcó. Desde ERC, Gabriel Rufián dijo que el de este jueves era el «día de la victoria» porque «marca el fin del régimen del 78». Llamó a la unidad del independentismo y advirtió de que aunque se aprobara la ley «aún falta la votación de un partido, el partido judicial Español», que ya sabemos lo que votará». «Próxima parada: referendo», sostuvo Rufián.

 

El líder de Vox, Santiago Abascal, aseguró que la ley de amnistía está pensada para «legitimar la violencia política y que Sánchez permanezca en el poder». Cargó contra el PP, acusándole de «tender la mano al PSOE». Gerardo Pisarello (Sumar) se refirió a la norma como una victoria frente a «las derechas radicalizadas empeñadas en derrotar al Gobierno». Mikel Legarda (PNV) señaló que la amnistía supone afrontar «con un nuevo punto de vista» la «grave crisis constitucional» vivida en Cataluña.

El portavoz de EH BIldu, Jon Iñarritu, indicó que con la ley se puede generar un «clima de confianza y respeto» para abordar la cuestión territorial del Estado y Nestor Rego (BNG) recalcó que es «toda una lección de firmeza democrática frente al inmovilismo de la derecha».