La reforma de la ley del «solo sí es sí» aumenta las penas cuando en los delitos haya violencia

El acuerdo entre el PSOE y el PP tiene el objetivo de que no se sigan produciendo reducciones de penas ni excarcelaciones, pero solo una vez que la reforma entre en vigor, porque todos los delitos cometidos anteriormente podrán acogerse al contenido primigenio de la ley por el principio de aplicar la norma más favorable al reo en el momento en el que se comete el delito. Los socialistas niegan que, como afirman en Unidas Podemos y en ERC y EH Bildu, tradicionales aliados del Gobierno, se haya retirado el consentimiento del corazón de la ley para volver al Código Penal anterior.

Entre las diferencias que introduce la reforma aprobada este jueves está la de que habrá más pena para las agresiones sexuales en grupo o las que se inflijan a personas químicamente. Pero la esencia de la reforma es que se incorpora un subtipo penal agravado dentro de los delitos de agresión sexual que eleva las condenas cuando se hayan cometido con violencia o intimidación. El nuevo texto añade también la tipificación como delito de la distribución de contenidos que inciten a la agresión sexual a menores de 16 años.

La reforma reintroduce la responsabilidad de las personas jurídicas en los casos de trato degradante, acoso laboral o inmobiliario. Esta es una de las enmiendas que ha introducido el PP al estimar que se había despenalizado por error. Además, se ha aprovechado para corregir el artículo 132 del Código Penal para que la prescripción de los delitos sexuales cometidos contra menores de 18 años no empiece a computar hasta que la víctima tenga 35 años.

Con la reforma, se diferencia entre penas en caso de que exista o no violencia, en contra de lo que pretendía Unidas Podemos. Para la agresión sexual sin agravante, la ley del «solo sí es sí» planteaba penas de 1 a 4 años. La reforma las eleva a entre 1 y 5 años. En caso de agresión sexual con agravante, la ley del «solo sí es sí» planteaba una pena de entre 2 a 8 años, mientras que la reforma aprobada las eleva a de 5 a 10 años.

Agresiones con penetración

En la agresión sexual con penetración, la ley vigente planteaba entre 4 y 12 años de prisión. Ahora, con la reforma, serán de 6 a 12 años. Si la agresión sexual se produce con penetración y agravante, la ley del «solo sí es sí» establecía unas penas de entre 7 y 15 años. La reforma aprobada eleva esas condenas a entre 12 y 15 años. En caso de agresión sexual con penetración a menores sin violencia, la ley establece de 6 a 12 años y la reforma los eleva a entre 8 y 12 años .

Por último, en el caso de agresión sexual con penetración a menores de 16 años se pasa de los 10 a 15 años que planteaba la ley a entre 12 y 15 años. En la mayoría de los casos, la reforma retoma las penas de la ley anterior, de 1995.

Unidas Podemos y ERC y EH  Bildu habían presentado sus propias propuestas de reforma de las penas, prácticamente idénticas a las que planteaba Unidas Podemos, pero todas sus enmiendas fueron rechazas este jueves por la mayoría del Congreso.

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La Voz

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