Por primera vez, asume que el país africano fue víctima de «sufrimiento y humillaciones» durante el reinado de Leopoldo II, en medio del debate sobre la situación racial en el país
30 jun 2020 . Actualizado a las 20:09 h.El rey Felipe de Bélgica reconoció esta martes por primera vez la «violencia y crueldad» ejercidas en el Congo bajo el reinado de Leopoldo II, en una carta enviada al primer ministro de la República Democrática del Congo, Félix Tshisekedi, por el 60 aniversario de la independencia de la excolonia belga. La figura de Leopoldo II está en el centro del debate sobre el racismo, abierto tras la ola de protestas por la muerte del estadounidense George Floyd, por ser el principal responsable del genocidio cometido a finales del siglo XIX contra los congoleños.
Felipe expresa su «profundo arrepentimiento» por las «heridas y humillación» que el colonialismo de su antepasado Leopoldo II (1835-1909) causó en el Congo. «Quiero expresar mi más profundo arrepentimiento por las heridas del pasado cuyo dolor revive hoy por la discriminación aún demasiado presente en nuestras sociedades», escribió el monarca en la misiva, en la que evita nombrar expresamente a Leopoldo II.
Concluye su mensaje de arrepentimiento afirmando que seguirá luchando contra todas las formas de racismo y anima al Parlamento belga a avanzar en la «reflexión» sobre la época colonialista para que «nuestra memoria quede definitivamente en paz».
El camino «de la verdad y la memoria»
Aunque el rey de los belgas evitó una declaración pública de perdón, al optar por trasladar este gesto por carta, la primera ministra de Bélgica, Sophie Wilmès, sí compareció ante las cámaras para, en una ceremonia conmemorativa en Bruselas por la independencia del país africano, pedir que Bélgica inicie el camino «de la búsqueda, la verdad y la memoria» para observar con «lucidez» el pasado de «desigualdad y violencia» contra los congoleños.
El mensaje del monarca se produce después de los ataques sufridos por las estatuas de Leopoldo II. Está en marcha una iniciativa ciudadana para retirar estatuas y eliminar los nombres de calles y plazas que contengan referencias a la historia colonial y especialmente al rey Leopoldo II.
Más de 10 millones de congoleños, exterminados en el territorio privado de Leopoldo II
Durante la Conferencia de Berlín en 1885, el Congo fue declarado propiedad privada del rey Leopoldo II. Se convirtió en multimillonario a cuenta de la explotación de recursos naturales para lo que esclavizó a los congoleños en un ambiente de extrema violencia, que dejó más 10 millones de muertos (la mitad de la población).
La deshumanización fue tal que en la Expo de 1958 se mostró un «zoológico humano» de hombres, mujeres y niños.