Las delegaciones de socialistas e independentistas volverán a reunirse el martes
29 nov 2019 . Actualizado a las 08:48 h.ERC se mantiene en su negativa para investir a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno tras la primera reunión que han mantenido en la tarde de este jueves en el Congreso los equipos negociadores de la formación republicana y el PSOE. Los secesionistas continúan firmes con su exigencia de establecer una mesa de negociación entre el Gobierno central y el Gobierno autonómico a cambio de abstenerse en la votación de investidura, en la que su voto se antoja como fundamental para que esta prospere.
Según se recoge en el comunicado distribuido por ERC a la prensa, esta mesa de negociación «entre gobiernos» debe abordar todos los temas, sin ningún tipo de «vetos» o líneas rojas, lo que en el lenguaje independentista viene a significar la posibilidad de celebrar un referendo de autodeterminación en un futuro no muy lejano. Tal y como había avanzado a principios de esta semana el portavoz de los republicanos en el Congreso, Gabriel Rufián, la mesa de negociación debe contar con «un calendario» concreto, así como con las suficientes «garantías» para que se vayan cumpliendo los acuerdos alcanzados en la misma.
Según el comunicado que han distribuido los republicanos a la conclusión de esta toma de contacto, ambas formaciones volverán a verse las caras el próximo martes 3 de diciembre, día en el que se constituyen las nuevas Cortes, en una nueva reunión a las 17 horas en una de las dependencias de la Cámara Baja.
La de este jueves comprendió alrededor de dos horas y cuarto, y a su conclusión ninguno de los participantes ofreció declaraciones a la prensa. Independentistas y socialistas pactaron no hacer ningún tipo de valoración con el objetivo de no repetir el circo mediático en el que se convirtieron las negociaciones de este verano entre el PSOE y Podemos para explorar un Gobierno de coalición con constantes e interesadas filtraciones a la conclusión de cada encuentro y que, naturalmente, acabó en un fracaso y la consiguiente repetición electoral.
«Encauzar el conflicto político»
El PSOE también compartió un breve comunicado en el que admiten la «existencia de diferencias» con la otra parte, pero también de «puntos de encuentro» entre los que destaca la «necesidad de encauzar el conflicto político» en Cataluña «desde el diálogo y el entendimiento institucional», abordar los retos a los que se enfrenta el sector de la automoción o la «recuperación de derechos civiles y laborales cercenados por el PP», dice la nota distribuida por los socialistas.
Rufián capitaneó un equipo formado también por Marta Vilalta, secretaria general adjunta del partido, y Josep Maria Jové, presidente del consejo nacional y propietario de la libreta requisada por la Guardia Civil con las anotaciones detalladas con el paso a paso para proclamar la independencia. Por parte de los socialistas acudieron la portavoz parlamentaria, Adriana Lastra, el ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, y Salvador Illa, secretario de organización del PSC, la rama del partido en Cataluña y que ejerce un gran peso dentro de Ferraz.
«Él flota» sobre la reunión
Las delegaciones encabezadas por Rufián y por la portavoz socialista, Adriana Lastra, se han reunido en una sala institucional de uno de los edificios de ampliación del Congreso de los Diputados, reforzando el carácter solemne de esta primera cita oficial entre ambos partidos para negociar la investidura de Pedro Sánchez.
La sala está presidida por un óleo de José Luis Azparren, un pintor nacido en Murcia en 1946. El cuadro, que data de 1984, lleva por título Él flota sobre la situación.
Pablo Iglesias augura curvas en los Consejos de Ministros del bipartito
Pablo Iglesias fue cuestionado este jueves sobre el desmarque de Podemos de este martes al abstenerse en la votación de la Diputación Permanente para convalidar un real decreto ley impulsado por el PSOE con el objetivo de poner fin a la llamada «república digital catalana». El secretario general de la formación morada y, en caso de que Sánchez acabe salvando la investidura, futuro vicepresidente del Gobierno, admitió que la coalición que pretenden conformar junto a los socialistas promete curvas, y que encontrar una postura común ante cualquier desavenencia que se lleve al Consejo de Ministros «será compleja» de solucionar, pero que, en cualquier caso, lavarán la ropa sucia dentro de casa. «Esta discusión se quedará en el Consejo de Ministros, y fuera tendremos posición de Gobierno», garantizó.
La postura de Podemos en la votación para que la Moncloa disponga de capacidad de intervenir las webs independentistas en caso de emergencia no gustó en el sector de los anticapitalistas, que acusaron a Iglesias de haberse tragado el «primer sapo» con su cambio de postura, ya que inicialmente tenían pensado votar en contra y acabaron absteniéndose como gesto de buena voluntad hacia el Gobierno. «Fuimos leales y muy claros. Ya dijimos que el decreto no nos gustaba, porque afectaba a los derechos fundamentales y pedimos que no lo presentaran», trató de justificarse, aunque precisó que la Diputación Permanente todavía es fruto de las elecciones de abril, ya que las nuevas Cortes no se constituirán hasta el próximo 3 de diciembre.
Por otra parte, el secretario general de Podemos se mostró optimista de cara a las negociaciones para la investidura, y confió en que el culebrón termine antes del comienzo de las vacaciones de Navidad: «Espero que la próxima Nochebuena los españoles puedan cenar con un Gobierno», aseguró, coincidiendo con las declaraciones de varios dirigentes socialistas en los últimos días. Para ello garantizó que es el PSOE el que tiene que llevar la iniciativa, aunque prometió arrimar el hombro con «esfuerzo» para que las negociaciones con los secesionistas catalanes acaben llegando a buen puerto. Conviene no olvidar que Iglesias visitó a principios de este año en la prisión de Lledoners al líder de ERC, Oriol Junqueras, para solicitarle que no tumbara el proyecto de Presupuestos.
Desencuentro en el País Vasco
El desencuentro de este miércoles en Madrid volvió a repetirse este jueves en Vitoria, en donde socialistas y morados volvieron a votar de forma distinta a una propuesta elevada al Parlamento vasco por las formaciones soberanistas en la que defienden «el derecho a decidir». La iniciativa salió adelante gracias a los votos del PNV y EH Bildu, y a la abstención de Elkarrekin Podemos, la marca que la formación morada emplea en el País Vasco. En contra se posicionaron el PSE, la rama de los socialistas en esta comunidad autónoma, y el PP.
A pesar de coincidir en el sentido del voto, el PNV aclaró durante el debate que rechazaban la vía unilateral para alcanzar la independencia.