Cuando la subieron a la báscula, la pequeña Chrsitina pesaba 9,11 libras
14 sep 2019 . Actualizado a las 16:35 h.Hace 18 años que los atentados del World Trade Center conmocionaron a Estados Unidos y a medio mundo occidental. Era mediodía y todas las televisiones del país interrumpían sus emisiones para informar del mayor atentado suicida de la historia. Más de 3.000 muertos y más de 6.000 heridos con el sello de Al Qaeda en una nueva ofensiva con el gobierno de George W. Bush.
Pues bien, en el aniversario de los 18 años después del accidente parece que se ha obrado un milagro. Una mujer llamada Cametrione Moore-Brown ha dado a luz a un bebé a las 9.11 horas con un peso de 9 libras y 11 onzas (4,13 Kg). Desde los servicios de emergencia del Methodist Le Bonheur Germantown Hospital de Germantown, en Tennessee, jamás habían visto algo igual: «He trabajado en servicios para mujeres durante más de 35 años, y nunca he visto que la fecha de nacimiento, la hora de nacimiento y el peso de un bebé coincidan», comentaba una trabajadora del hospital a la BBC.
«Christina es un pequeño milagro en un momento tan triste. Ella es una nueva vida entre la devastación y la destrucción», dijo su madre emocionada a los medios de comunicación. Y tanto. La familia admitió no saber cómo gestionar estos sentimientos encontrados. Por un lado, el 11-S es un día para honrar y recordar fervientemente a las víctimas de aquella masacre, pero por otro no podían ni debían reprimir la enorme alegría que les embargaba al ver los ojos de su niña.
«Escuchamos al médico anunciar el momento del nacimiento el 11 de septiembre y luego, cuando pesaron a Christina, escuchamos jadeos de asombro cuando todos se dieron cuenta de que Christina pesaba 11,9 libras y que había naciido a las 9.11", dijo el padre Justin Marrón. «Fue emocionante de verdad, especialmente encontrar algo de alegría durante un día de tanta tragedia», seguía el padre.
Todo el equipo médico del Methodist Le Bonheur Germantown confesó estar embargado por la ilusión de esta familia estadounidense. Nunca habían visto nada igual y tampoco tienen la certeza de que pueda volver a pasar.
La pequeña Christina abandonará el hospital en poco tiempo e irá a vivir con sus padres y sus hermanos, que han confesado que en cuanto sea un poco mayor y tenga la capacidad de enteder el contexto, se lo explicarán para que sea consciente del milagro de su nacimiento.
