Tiene el apoyo de su familia y de su enólogo, pero lo cierto es que más de cinco hectáreas de viñedos de la subzona Quiroga-Bibei de la Ribeira Sacra, una bodega y dos marcas de vino dependen del trabajo de una bodeguera y viticultora, Xiana Domínguez, que a sus 35 años se maneja con soltura en el sector. Sus caldos no dejan de recibir reconocimientos, y ella no puede estar más satisfecha.
Susana Luaña