El presidente de la Xunta pone deberes a su Gobierno en la toma de posesión, le exige «extraordinaria dedicación», excusa el continuismo, justifica el relevo de Guerra por Conde para crecer y define al vicepresidente Rueda como el «axeitado» para ayudarlo a coordinar el Ejecutivo
El presidente decide ceñir su promesa de una nueva reducción de altos cargos al nivel de los secretarios y directores xerais. La principal novedad, la vicepresidencia de Alfonso Rueda y la entrada de un asesor de Feijoo al frente de Industria