Los hermanos Farrelly dan una nueva vuelta de tuerca a la comedia romántica con «Amor ciego» Los hermanos Farrelly andan por el empate: gustan al gran público y provocan sarpullido en la crítica. Ellos se erigen en renovadores de la comedia escatológica, en líderes del humor transgresor, mientras los especialistas prefieren calificarles de pillos. En «Amor ciego» muestran a un fulano de coeficiente tirando a muy bajo, que se enamora de una chica elefantiásica a la que ve como una odalisca. El resto de estrenos apuesta por la variedad: crítica social («La cuadrilla»), drama («Hijos de un mismo Dios»), comedia negra («Un crimen en el paraíso»), acción («El único») y un divertimento («A mi madre le gustan las mujeres»).
MIGUEL A. FERNÁNDEZ