La aún por aclarar eliminación del jefe de Al Qaida supone un hito en la trayectoria de la CIA, marcada por descomunales errores, como su incapacidad para evitar el 11-S o su afirmación de que Sadam poseía armas de destrucción masiva que llevó a la guerra de Irak, además de mortíferas operaciones encubiertas y asesinatos
Por Enrique Clemente