El martes se cumplen diez años de la decisión del juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu de imputar a la antigua cúpula de la entidad bancaria por el uso irregular de las tarjetas de empresa
«Estoy libre de cualquier tipo de esclavitud con ninguna persona y menos con esta gente», declaró en el juicio en referencia al Bigotes, a quien definió como «colaborador político», pero en ningún caso «amigo». Atrás queda la llamada del famoso «te quiero un huevo»