Al acto final solo asistió el Concello y algunos miembros de las asociaciones, que hicieron un balance satisfactorio: «Nos temíamos lo peor, pero hubo mucha más gente de la esperada»
La ciudad disfrutó con cautela de la fiesta de recreación histórica. La lluvia y la pandemia alejaron las aglomeraciones, aunque hubo más afluencia que el viernes