La periodista ha explicado que «Egoístas, inmortales y viajeras», el último libro del catedrático de la Universidad de Oviedo, le sirvió para comprender más la enfermedad
26 ene 2022 . Actualizado a las 18:21 h.Julia Otero ha regresado a los medios de comunicación después de haber estado once meses apartada del foco mediático a causa de un cáncer de colón que recientemente ha superado. La periodista volvió a su puesto de trabajo en Onda Cero el pasado 10 de enero. Otero visitó El Hormiguero, donde habló de su enfermedad, los procesos de recuperación y su nueva ilusión ante 2022. Durante la entrevista en el programa de Pablo Motos, la periodista explicó a la audiencia lo qué es vivir con esas células cancerígenas a las que ella llama «Egoístas», en referencia al último trabajo del científico y catedrático de la Universidad de Oviedo, Carlos Lopez Otín, el cual ha sido un gran apoyo contra la enfermedad. El paso de Otero por el Hormiguero ha servido para promulgar datos e información científicamente sobre la enfermedad. La periodista se documentó sobre el cáncer a conciencia y demostró sus dotes de comunicadora. Otero ha aprovechado su visita al plató de Antena 3 para llevar «Egoístas, inmortales y viajeras», la publicación del científico que ha utilizado como herramienta de documentación para informarse de su enfermedad.
«Egoístas, inmortales y viajeras: Las claves del cáncer y de sus nuevos tratamientos: conocer para curar», libro del catedrático de Bioquímica de la Universidad de Oviedo, fue publicado en noviembre de 2021 y ha servido de base a Otero para comprender e ir más allá sobre la enfermedad. «Así son las células cancerígenas: egoístas, porque van a lo suyo, inmortales porque no paran de reproducirse a gran velocidad; y viajeras, que es la parte que más miedo da, porque pueden recorrer el torrente sanguíneo y producir metástasis en otro tejido». Otero explica que estas células son «las más perversas de todas, burlan el sistema inmunológico hasta llegar a otro órgano y crean su propio sistema circulatorio», ha explicado Otero por qué el título del trabajo.
Otero ha hablado de su experiencia pero no quiere ser «bandera ni estandarte de nada: soy una enferma más de los 800.000 españoles que cada año son diagnosticados de cáncer. solo quiero contar mi historia y ayudar a la gente que no tiene voz. Si alguna cosa les sirve a ellos o a su entorno, habrá merecido la pena».
Otero ha remarcado la importancia de vigilar el lenguaje a la hora de comunicar sobre el cáncer, así como la necesidad de desterrar los términos bélicos. «No eres fuerte, no hay otra opción que ser fuerte Tienes que resistir como sea. No eres más valiente ni vas a una guerra. Uno no es culpable de perder la batalla. No se puede establecer en términos de ganar y perder, parece que con tu actitud puedas decidir vencer al cáncer y no es así. Y en mi caso, no he vencido al cáncer. He acabado con esas células en una zona del colón, pero pueden volver. La salud es provisional. Hay que aprender a vivir con esa provisionalidad. Alguien sano puede morir en un accidente. La única diferencia es que yo vivo con la incertidumbre, pero la vida está llena de incertidumbres. El spoiler que sabemos y olvidamos: todos vamos a morir. Tampoco está mal que seamos conscientes de cuál es el final».